El monumento fue diseñado por el arquitecto Manuel Álvarez Bazil y construido por el ingeniero Rudyard Montás Bazil
Uno de los acontecimientos de mayor significación y trascendencia en la vida de cada pueblo lo es, como afirmó el historiador Emilio Rodríguez Demorizi, la conformación del órgano jurídico-político que habrá de orientar los destinos de esa comunidad. De ahí que la Constitución del 6 de noviembre de 1884, constituya “la razón de ser del pueblo dominicano como colectividad nacida del mismo hecho del descubrimiento de América”.
En honor a esas palabras, un grupo de intelectuales de San Cristóbal, ciudad donde se firmó la Constitución, decidió impulsar la edificación de un monumento en homenaje a los hombres que estuvieron involucrados en la consolidación de la Carta Magna.
El monumento surge como una necesidad de crear un símbolo que constituya la identidad de esta provincia, asegura el coordinar del Departamento de Cultura del Ayuntamiento de San Cristóbal, Ramón Mesa, quien señala que el lugar donde hoy está el monumento antes fue ocupado por una estatua de Rafael Leónidas Trujillo montado en un caballo, que fue derrumbada tras la muerte del dictador.
Aunque el monumento se comenzó a construir en el 2002, después de varios encuentros de líderes comunitarios, historiadores y otras personalidades de la provincia, el coordinar del área de Ciencias Sociales de Instituto Politécnico Loyola, Eugenio Galán, puntualiza que la idea de un espacio así se comenzó a discutir decenas de años atrás. Sin embargo, fue en la gestión del alcalde Dionisio de la Rosa que tomó más fuerza.
El monumento fue diseñado por el arquitecto Manuel Álvarez Bazil y construido por el ingeniero Rudyard Montás Bazil. Está ubicado en la Plaza de la Constitución, establecido en forma de rotonda, en la margen occidental del río Nigua, frente a la antigua avenida Libertad.
Esta infraestructura, inaugurada en el 2006, es considerada la de mayor importancia en materia de representatividad de San Cristóbal. Fue levantada en hormigón armado en forma piramidal, dividida en tres bloques de 11 pirámides, que representan los 33 hombres que firmaron nuestra Carta Magna. La menor está por los 12 metros y la mayor alcanza los 15 metros.
Todas estas están unidas por una viga que, de acuerdo con el profesor Galán, representa la unidad que tenían los firmantes. “Querían transmitir fundamentalmente que esta nueva ley garantizaría los derechos por los que Juan Pablo Duarte y otros líderes patrios lucharon”, expresó.
En las primeras columnas, comenzando desde el centro de la edificación, están escritos los nombres de los constituyentes, tales como Manuel Abreu, Juan de Acosta, Juan Pablo Andújar, Julián de Aponte, José de Jesús Ayala y García, Bernardo Secundino Aybar, Buenaventura Báez, José María Caminero, Manuel R. Castellanos, Casimiro Cordero, Manuel Díaz, Juan Luis Franco Bidó, Bernard M. González.
En cada bloque del Monumento a los Constituyentes, talladas en lo alto, se leen tres frases de Gregorio Luperón, Emilio Rodríguez Demorizi y Juan Nepomuceno Tejera dedicadas a la Carga Magna. La de Rodríguez Demorizi dice: “Debemos aspirar a que la Constitución no sea preponderantemente un instrumento oficial del uso privativo de los gobiernos sino catecismo de todo ciudadano”. En el centro encierran el logo y símbolo del ayuntamiento municipal de San Cristóbal.
“Fue un momento importante para todos los habitantes de San Cristóbal, porque a partir de ahí se empieza a mandar un mensaje de respeto a la Constitución. Pero también de gratitud y honra a los hombres que la impulsaron, y que eligieron nuestro pueblo para ese hecho histórico tan trascendental”, manifiesta Mesa, quien asegura que “el monumento es un espacio que le recuerda a la juventud de todo el país la necesidad de identificarse con el suceso que nos constituye como República”.
La Constitución se firmó frente al Ayuntamiento donde está el parque de “Los Vagos” o Parque 6 de Noviembre. Allí estaba la casa de José María Cabral y Luna, uno de los hombres más influyentes de la provincia en esa época, y la prestaron para eso. Cabral y Luna fue el primer presidente dominicano elegido por sufragio universal masculino.
Inconvenientes y propuesta
Aunque valora el hecho de que exista un espacio dedicado a los constituyentes, Galán considera que la ubicación del monumento “no es la correcta, porque al estar en medio de una rotonda y además en una de las principales vías de la provincia, representa un riesgo para los que visitan el espacios, ya que tampoco cuenta con semáforos”.
Varios centros educativos llevan a sus estudiantes a visitar el lugar, “pero cuando van a un horario en el que hay mucho sol o de repente llueve, no saben qué hacer, porque el monumento no fue diseñado para que los visitantes permanezcan por mucho tiempo, porque ni asientos tiene y nada que cubra arriba”.
Galán propone que se reconstruya el espacio. “No se estaría atentando con lo que hicieron nuestros héroes patrios, porque al final de cuentas ellos no edificaron esa obra. Más que eso, se estaría rindiendo honor con una edificación más adecuada, que le brinde a la gente la oportunidad de permanecer por más tiempo”.
Galán también afirma que “el valor que debiera tener el monumento a los constituyentes no es el que tiene. La gente al principio tenía muchas ganas de visitar este lugar, pero cuando se cansó de estar en el sol y no saber dónde sentarse, decidió no volver más. Además, los jóvenes de ahora no se interesan en lo más mínimo por lo que representa esta ley para nuestra democracia, y eso hace que sea vulnerable y se le cambie cada vez que se quiera perpetuar un gobierno”.
“Anhelo un espacio donde se pueda ir y apreciar más allá de la estructura. Uno que represente más que una edificación, que evidencie la lucha de muchos hombres y mujeres que querían ver un país libre, donde la gente valore sus esfuerzos”, enfatiza Galán.
Dicen que hace falta un museo
Desde hace algunos años, varios historiadores e intelectuales de la provincia han propuesto la creación de un museo en honor a la Constitución, “en el que se puedan ver las diferentes modificaciones que se le han hecho, la historia presentada de forma dinámica, objetos de algunos de los firmantes, o cualquier otra cosa que haga referencia a esa época”, expresa Ramón Mesa, quien es parte del comité que realizó el anteproyecto que contempla la construcción de dicha infraestructura. “Lo que se planifica es un gran centro cultural, que le permita a la gente hacer actos diversos, enfocados en los valores constitucionales y de derecho. Sería el lugar ideal para que los jóvenes retomen el sentido de lucha y revolución, para que defienda la Nación”, manifestó Mesa. El profesor Galán subraya que “lo que sería un problema es ubicar un espacio para el proyecto”, que considera “más que necesario, urgente”. “Si se crea el museo, se podrían ofrecer talleres y conferencias sobre democracia y derechos. Los jóvenes serían los principales protagonistas. Sobre ellos descansa el futuro de la República Dominicana”, manifiesta Galán.
Ramón Mesa
Lo que se planifica es un gran centro cultural, que le permita a la gente hacer actos diversos, enfocados en los valores constitucionales”.
Eugenio Galán
Si se crea el museo, se podrían ofrecer talleres y conferencias sobre democracia y derechos. Los jóvenes serían los principales protagonistas”.
Ramón Mesa
Es importante que cada uno de nuestro jóvenes entienda el valor que tiene para el país la Constitución. Deben protegerla a toda costa”.