Egresado de la Escuela Nacional de Arte Dramático (ENAD), donde luego fue profesor durante siete años, hasta el 2012, Fausto Rojas es un joven actor dominicano que, desde hace varios años, se hace espacio, de la mejor forma, en la escena teatral dominicana. Su pasión por esta rama del arte lo llevó, paralelamente a sus estudios en la ENAD, a formarse en el Teatro La Veladora, junto a Radhamés Polanco. “Él fue uno de mis maestros durante mi primer año de formación; cuando vi su obra “Las criadas de Freidel”, quedé muy interesado por su arte y poesía; me integré al grupo y desde ese día somos uno”, nos cuenta. En el mundo del cine, también se ha iniciado. Se formó con Juan Basanta y Tanya Valette. “Con Juan, trabajé durante ocho años como acting coach y director de documentales. En ese mismo período, me fui a Maine Media Workshops, en Estados Unidos, a perfeccionar las técnicas de cine”, recuerda, agradecido de haber estado cerca de maestros como Eugenio Barba, Julia Varley y John Strasberg, quienes han aportado a su carrera un valor intangible e incalculable, que agradece a diario.
Actualmente, diriges la Compañía Nacional de Teatro (CNT), ¿Qué persigue la misma?
Desde octubre de 2016, estoy al frente de esta institución, la más alta representación del arte dramático nacional. Nuestra misión es llevar el arte teatral a nuestra gente; que sepan que estamos a su servicio. Además, entre nuestras metas está internacionalizar la Compañía. De hecho, el año que viene tenemos un compromiso en el extranjero, que más adelante anunciaremos.
¿En cuáles proyectos se encuentra sumergida actualmente la CNT?
Estamos muy contentos de poder institucionalizar y rescatar la temporada 2017 de la CNT… Actualmente, estamos trabajando en una nueva obra, titulada “Rosa”, del autor dominicano Juan Bosch, cuya dramaturgia y montaje están encaminados, y que estrenaremos en el 2018.
Y a futuro, ¿Qué les espera?
Seguir trabajando en la difusión y promoción de la Compañía. También es nuestro deseo llevar la obra “Yago” a todos los pueblos de RD. Este montaje, una versión libre del “Otello” de William Shakespeare, ha llamado la atención de varios organizadores de festivales extranjeros, a lo que estamos dando seguimiento para que se materialice.
Como joven visionario, ¿Qué huella pretendes dejar en la CNT?
Que cada dominicano tenga conocimiento sobre la existencia de la CNT, que la asuma como su compañía teatral, reconozca la calidad de su trabajo y se entere de lo que presentamos en cada temporada. Aquí es importante destacar que gracias al apoyo del Ministerio de Cultura, la Dirección General de Bellas Artes y la Dirección Nacional de Drama, hemos remozado nuestro Salón de Investigación, y prontamente será inaugurado el Salón de Ensayos de la CNT, que encontramos en total abandono.
En materia teatral, ¿De qué tiene sed la República Dominicana?
De mucho teatro. Que la alta cultura llegue a cada rincón del país, sobre todo a los más marginados. También, de un teatro comprensible para nuestro pueblo. De que puedan ver los clásicos, pero también montajes modernos; que conozcan nuestro repertorio. Hace falta un teatro divertido y didáctico. Por ejemplo, el solo hecho de llevarles un clásico a nuestro pueblo, como lo es “Yago”, y adaptarlo a nuestra cultura e identidad, los acerca a la cultura, a nuestro arte; logra que se identifiquen con nuestras propuestas. Así cumplimos una de nuestras metas: formar el potencial espectador nacional.
¿Nos falta mucho por recorrer o vamos por buen camino?
Creo que vamos por buen camino. Sangre joven, buenos maestros, trayectorias ejemplares de los grandes: Iván García, Ángel Hache, Franklin Domínguez, Radhamés Polanco, Servio Uribe, Haffe Serulle, Víctor Vidal, Carlota Carretero, María Castillo… que nos invitan a entregarlo todo en este arte milenario para seguir fortaleciendo nuestro teatro dominicano.
El teatro transforma… pero, ¿Cómo lo hace?
Presentando un mejor mundo, el país que soñamos, el país conceptual. Divirtiendo el espíritu. Regocijando el alma. Engrandeciendo el imaginario colectivo de nuestro pueblo. Educando.
Labor
A través de la Compañía Nacional de Teatro, buscamos hacer teatro para el pueblo, con el que ellos se identifiquen y no les sea ajeno”.
Formación
Soy una persona curiosa. Ahora, gracias al internet vivo sumergido en el conocimiento, actualizándome con talleres, arte
y sobre todo, con mucha poesía”.