Odilius Vlak es un escritor sureño, nacido en Azua de Compostela “de la tribu de Efraím, como decimos”. Su afición a la lectura comenzó en su infancia, pero su acceso a la literatura fue en su adolescencia, porque en esa etapa entraron los libros, el intercambio con amigos lectores, la identificación con un autor o un género de ficción en particular, los autores que le marcaron, “el resto fue decirme a mí mismo que también quería ser escritor, ser parte de esa épica de la palabra”, indica Vlak. Considera que su mayor logro a nivel literario, más allá de los títulos publicados, es ser una parte reconocida de la comunidad de literatura especulativa hispanoamericana, eso gracias a las revistas que han publicado sus trabajos y los eventos internacionales en los que ha participado.
¿Cuál es el género que más le gusta y qué temas tratan sus libros?
Sin dudas la ciencia ficción, en todas sus vertientes, y como extensión la literatura especulativa en general. Escritos iniciales, esos que me gusta llamar poemas en prosa como los de Plexus lunaris y Tumbas sin fondo exploran temas góticos, cierto misticismo oscuro, esoterismo, fantasía y mitología. Otros como Crónicas historiológicas, ya entran a la ciencia ficción de factura cyberpunk mezclado con fantasía histórica. Eje central de ese ciclo de cuentos, es la historia dominicana, su folklore, mitología taína y africana, catolicismo, en fin: un pasado y futuro imaginarios de la identidad dominicana. Un próximo viaje al centro de los cuentos, es fantasía oscura e histórica centrada en los mitos taínos y la figura de fray Ramón Pané, cuya llegada, permanencia y desaparición del escenario de la conquista y colonización de la isla, me resulta un misterio fascinante. En fin, temas diversos, pero siempre mirados con el lente especulativo.
¿Qué considera que es lo más difícil de ser escritor?
Diría que el hecho de serlo. Es un tipo de vida muy compleja, obsesiva, en muchas ocasiones divorciado de la realidad, que, naturalmente, sobre todo en un medio ambiente como el de nuestro país, te hará chocar incluso con el sentido común. Lo mejor es que es una fuerza que supera todos esos obstáculos.
¿Cuál ha sido su mayor logro a nivel literario?
Sinceramente diría que, más allá de los títulos publicados, es ser una parte reconocida de la comunidad de literatura especulativa hispanoamericana. Eso gracias a las revistas que han publicado mis trabajos y los eventos internacionales en los cuales he participado.
¿Cuándo escribió su primer libro y qué tema trató en el mismo?
Oficialmente hablando: Crónicas de ouroboros (editorial La Secta de los Perros/Puerto Rico/2014). Dos historias: “Descarga de meteoritos en la Batalla del 19 de Marzo” y “Juegoedrox platónicos”. Sus temas son los mismos que los de Crónicas historiológicas.
¿Bajo qué parámetros definió su sello distintivo al escribir?
Diría que he logrado más personalidad en los temas e ideas que trabajo, que en el estilo de la prosa en sí. Sobre todo cierta efectividad en asociar fantasía, ciencia ficción y hechos históricos. Mi estilo de pretende ser en un tono de aventura, pero se me dan buenas asociaciones de imágenes. Igual tiendo hacia construcciones minimalistas cada vez más.
¿Influyen las creencias políticas, sociales y religiosas en el éxito o fracaso de un libro?
Claro, pues apelan a áreas del quehacer humano muy competitivas, relacionadas de manera directa con el poder, con gobernar un país, sus recursos, con darle sentido a la existencia en esta tierra y cómo se debe organizar una sociedad o los cambios que deba realizar. Ni hablar de las pasiones ideológicas o el fanatismo religioso. Si reflejas en tu literatura algo que resulte inaceptable para el establishment de turno, el sistema te marca en rojo. Pero si hasta tenemos una moda llamada cancelación cultural.
¿Es necesario vivir y leer mucho antes de escribir un libro?
En mi experiencia lo primero no ha sido nunca una de mis herramientas creativas. Lo segundo sí. Leer es fundamental, tanto ficción como no ficción. Pues en la primera están los modelos que nos inspiran a nivel creativo, y en la segunda la investigación que debe siempre sustentar la obra. Y en cuanto a hábito recreativo y lúdico, leer es sin dudas lo más sapiens que un ser humano puede cultivar.
¿Qué diferencia sus primeros libros y de los más recientes?
Los primeros dependían de la prosa. Había poca historia y menos tramas. Por eso los califico de poemas en prosa. Los últimos representan otra etapa y búsqueda, son más definidos en cuanto a sus géneros especulativos de pertenencia, además de reflejar más preocupación por la trama que por el lenguaje.
¿Cuál es el papel del escritor en la realidad social del país?
Entiendo que un escritor más que un escritor, ya contextualizado en un marco más amplio que el de su pequeño nicho de lectores y comunidad, debe tener la disposición de comentar cualquier faceta de la realidad que le rodea y sus procesos. Me identifico con los escritores que descienden sin problemas de su torre de marfil para participar en un talk show y hablar de, por ejemplo, dembow, política o la cultura de las bancas de apuestas.
¿En qué proyectos se encuentra en la actualidad?
Estoy enfocado en la editorial Mentes Extremófilas, la cual comenzó como think tank en 2015, y creció a editorial hace dos años. Junto a mi cómplice en el crimen de imaginar, Eddaviel estamos “fajados” adelantando la agenda 2023 de nuestros proyectos y títulos. La novela gráfica Esu: la entidad más incomprendida del universo, ha tenido una buena acogida desde el año pasado. Y viene otro en coedición con la Editora Nacional: Viaje al centro de los mitos. En cuanto a actividades de divulgación, participaré en la FIL Lima 2023. También alistando lo del congreso internacional de literatura de ciencia ficción y fantasía del Caribe, el cual se llevará a cabo durante la próxima Feria Internacional del Libro.
Opinión
Mi estilo de escritura pretende ser en un tono de aventura, pero se me dan buenas asociaciones de imágenes. Igual tiendo hacia construcciones minimalistas cada vez más”.
Especie
El el género que más me gusta desarrollar, sin dudas es la ciencia ficción en todas sus vertientes y como extensión la literatura especulativa en general”.