La artista de origen dominicano radicada en Francia, Vivie Kieffer nació en el seno de una familia de artistas con una tradición que se remonta al siglo XIX. Desde temprana edad se sintió atraída por los trabajos que realizaba su padre, el artista y filósofo francés Gilbert Kieffer, y las actividades culturales que promovía su madre, Anetka Kieffer. Ese ambiente la motivó a formarse como artista, lo que combinó con estudios de Negocios en la Universidad de Barcelona, donde obtuvo el grado Suma Cum Laude por su maestría en “Art Actual: Administración y Crítica”, donde presentó una tesis comparativa sobre las ferias norteamericanas de arte “The Armory Show” y “Art Basel Miami Beach”. De acuerdo a la artista “he tenido la dicha de ser una embajadora cultural por el mundo, logrando incorporarme a los espacios que me han acogido como mi residencia, en los cuales aprendí su cultura”.
¿Cuándo fue tu encuentro inicial con la expresión plástica?
Vengo de una familia de artistas desde el siglo XIX por ambos lados, Francia y Polonia. Desde muy temprana edad me sentí atraída por los trabajos que realizaba mi padre, el artista y filósofo francés, Gilbert Keiffer, y por las actividades culturales que promovía mi madre, Anetka Kieffer. Ese ambiente de cultura me llevó a formarme como artista.
¿Qué te atrapa como tema?
La naturaleza y la fuerza de los elementos, son temas, fuerzas, que siempre me han cautivado. El filósofo Bachelard, habló de la energía de los elementos, embruja el estilo poético, y que es necesaria al equilibrio del humano, pues, con esta filosofía bachelardiana en acción, quiero abrir nuevos puentes poéticos para traer energía a nuestro cotidiano común. Tenemos que despertar a la sutileza de aquella naturaleza que nos rodea. La gracia del agua, la encuentro, tanto en las bellas playas de nuestra isla, como en los copos de nieve en Polonia.
¿Cómo visualizas la pintura en la actualidad?
Creo que la pintura está dando en su actualidad varios giros interesantes. Pienso, que cada vez más irá a la prospección de nuevas técnicas, pero espero, que con un interés más agudo hacia lo bello. En la realidad, como en la moda, ya no hay una sola expresión posible, en el arte existen varias dimensiones. Así, no pienso en la pintura como arte uniforme, sino más bien como devenir polifacético.
¿Qué te mueve como artista?
Me mueve el reto, el desafió y la elegancia de las formas. Lo que me mueve son las vibraciones positivas que puedan emitir esas obras, que dejen soñar a mi espectador. El tema de la naturaleza siempre ha sido importante en mi educación, y en mi interioridad. Creo que lo que mueve al artista, moverá a su público también.
¿Recuerdas tu primera obra, qué era, de qué trataba?
Siempre pensé en historias… Me pregunté de pequeña, con quizás ocho años, qué hacía que el sol brillara tan resplandeciente cada día. Y es que crecí en una isla francesa, cerca de Madagascar, llamada Reunión, entonces, llegué a la conclusión de que sería, quizás un mosquito que picara al sol, en caso de que éste olvidara brillar… Y los pinté a ambos de color azul, con oleo… sueño surrealista de niña… Hace mucho que no pensaba en este recuerdo.
¿Si tus obras hablaran que dirían sobre la artista?
Dirían que la artista busca una sintonía con el mundo, busca sentir esas vibraciones positivas y presentarlas. En mi más reciente exposición “Arte/ H2O-Atabey”, me propuse hacer hablar la poesía de los elementos, y en esta ocasión, el agua, un bien tan olvidado, pero tan preciado en tiempos de sequía. No nos olvidemos de Atabey, nuestra madre naturaleza, según los Taínos, y cuidemos del agua. Con esta exposición en honor al medio ambiente, junto a los artistas Enriquillo Amiama y Luis Zegarra, de increíbles calidez humana y búsqueda de lo esencial como yo, hacemos un llamado a cuidar del agua. Como embajadora del Global Youth Climate Network, asumí esta misión, he tenido la felicidad de poder compartirla con estos artistas de renombre de la plástica dominicana y peruana. Me apoyé también, sobre el talento visionario de Lillian Carrasco de Cury, comisaria de esta exposición.
Qué quieres transmitir, a través de tus obras?
Quiero transmitir la belleza y serenidad del ser humano en armonía con la naturaleza.
¿Qué piensas sobre el arte contemporáneo en nuestro país?
El arte contemporáneo presenta tendencias sintéticas del arte global.
¿Qué tan importante es la técnica en una obra de arte?
Sin reto, no hay logro; sin técnica no hay emoción, pero la técnica se va justamente actualizando, y se adapta también a la técnica ambiente de nuestra época. Es por eso que trabajo con ilusiones tridimensionales y técnicas computarizadas.
Desafío
Me mueve como artista el reto, el desafió y la elegancia de las formas. Son las vibraciones positivas que pueden emitir estas obras”.
