Mordaces pronunciamientos se produjeron en el país tras la reciente declaración de la bachata como Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, suscitándose un debate sobre quién o quienes deben considerarse padres del ritmo musical que comparte con el merengue la mayor aceptación entre los dominicanos. De inmediato desempolvamos el libro Bachata: Historia y evolución, del colega Carlos Batista, en el que profundiza sobre el tema, con aportes de intelectuales como Juan Daniel Balcácer, Diógenes Céspedes, Teófilo Barreiro, Tony Raful, César Mella, Dagoberto Tejada, Andrés L. Mateo, Marcio Veloz Maggiolo y Yaqui Núñez del Risco.
El libro, publicado en el 2002, reconoce a José Manuel Calderón como el iniciador del género en 1962, continuado en años siguientes por Rafael Encarnación, Bernardo Ortiz, Luis Segura, Mélida Rodríguez, Leonardo Paniagua y Eladio Romero Santos, quienes podrían considerarse la generación socialmente menospreciada por cantar “música de guardia” o de “cueros y cabareces”. Ya en los años 90, Luis Vargas, Anthony Santos y Raulín Rodríguez iniciaron la etapa de la aceptación, acrisolada con la llegada de Luis Días, Víctor Víctor, Sonia Silvestre y Juan Luis Guerra, quienes logran hacerla digerible en las capas medias y alta.
El filósofo Alemán Arthur Schopenhauer planteó que el mundo era “voluntad y representación”, y es lo que se da con la bachata. Los primeros fueron una voluntad que externaba un sentimiento real de dolor ante el amor truncado por la miseria, en tanto que la “bachata rosa”, de Guerra, es pura representación de un tipo de amargura que no vivió. El libro de Carlos pone ejemplos válidos: “Te regalo estas dos rosas cariñosas/ que te dicen de donde nació mi amor./ Ellas vienen a explicarte lo que siento/ son dos rosas que te traigo hechas canción( B. Ortiz)”. “Qué dolor tan grande/ tiene Rosa de mi./ Qué dolor tan grande/ porque la hice sufrir (R. Rodríguez). “Te regalo una rosa/ la encontré en el camino/ no sé si está desnuda/ o tiene un solo vestido (J.L. Guerra)”. Compare usted.