Para el conglomerado intelectual que observa la necesidad de una reingeniería de la vida nacional, a partir de un nuevo pensamiento que ofrezca una explicación objetiva a las realidades emergentes, tiene un valor importante el anuncio hecho esta semana por el Ministerio de Cultura y el Banco Central de la República Dominicana, de la realización de una Encuesta Nacional de Consumo Cultural (ENCC), a fin de establecer los aportes de ese sector a la economía y mejorar su calidad.
Con escritores y artistas como Aquiles Julián, Rafael Peralta Romero, Luis R. Santos, Amaury Sánchez y Pochi Familia hemos conversado en estos días sobre la urgencia de retomar la valoración de la cultura dominicana, con el criterio de que la misma representa lo que somos en su totalidad, desde la gastronomía, música, literatura, costumbres, estilos de hablar, hasta la manera en que se miran los dominicanos, expresando literalmente lo que cada uno piensa del otro.
Es oportuno el anuncio de Milagros Germán y Héctor Valdez Albizu, precisamente cuando la nación se encuentra a pocos días de elegir a las autoridades que deberán gobernar por un nuevo cuatrienio, porque la tarea de repensar la vida dominicana debe realizarse con la garantía de que a los proyectos de contextualización cultural se le darán seguimiento, tras un largo período de letargo, con un sistema educativo que tocó fondo en administraciones pasadas, lo que se refleja en el gusto musical de las nuevas generaciones.
Si República Dominicana no toma conciencia de la importancia de su cultura en el universo total de la nación, el futuro de la patria de Duarte, Sánchez, Mella y Luperón sería incierto. Las entidades suscribientes destacan que el levantamiento de la encuesta ya se ha realizado en un 91.7 por ciento y ofrecerá datos actualizados y precisos “sobre los hábitos culturales de la población dominicana, a través de una operación estadística a hogares en todo el territorio nacional, en los estratos rurales y urbanos”, lo que permitirá diseñar políticas públicas más equitativas dentro del sector cultural.