El pasado jueves 21 de noviembre se celebró el Día Mundial de la Filosofía. La Escuela de Filosofía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), la Escuela de Humanidades y Ciencias Sociales y el Departamento de Estudios Generales de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino y la Asociación Dominicana de Filosofía (ADOFIL), a través de diversas actividades celebraron este día que es una forma de resaltar la importancia de la Filosofía y su papel en el desarrollo de la humanidad. Aunque la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) comenzó a celebrar el Día de la Filosofía en 2002, no fue hasta el año 2005 que en la 18ª sesión de su 33ª Conferencia General en París 2005, previo informe de la Comisión III se estableció oficialmente su conmemoración el tercer jueves del mes de noviembre.
La celebración es una oportunidad para resaltar el papel de la Filosofía y fue establecida según la Unesco para “renovar el compromiso regional, subregional, e internacional en favor de la Filosofía; alentar el análisis, la investigación y los estudios filosóficos sobre los grandes problemas contemporáneos para responder mejor a los desafíos con que se enfrenta hoy en día la humanidad; sensibilizar a la opinión pública de la importancia de la Filosofía y de su utilización crítica en las elecciones que plantean a múltiples sociedades los efectos de la mundialización o la incorporación a la modernidad”. Además, fue creado “para hacer un balance de la situación de la enseñanza de la Filosofía en el mundo, insistiendo particularmente en las dificultades de acceso y subrayar la importancia de la generalización de la enseñanza filosófica para las generaciones futuras”.
En el documento sometido que crea oficialmente el Día Mundial de la Filosofía también se establecen como resultados esperados lograr “una mayor sensibilización de la opinión pública internacional de la necesidad de una reflexión filosófica libre, crítica y responsable; la movilización de la comunidad intelectual, los encargados de la adopción de decisiones, las instituciones pedagógicas y los medios de comunicación en favor de la promoción de la Filosofía”. Además, “el fortalecimiento de la cooperación internacional en los campos de la Filosofía, la Ética y las ciencias humanas y sociales; la elaboración de enfoques y modalidades de tipo innovador en materia de enseñanza y práctica de la Filosofía”.
De igual forma se pide a los Estados miembros que se empeñen en “la promoción de la Filosofía en su propio país; se asocien a la proclamación de un día mundial de la Filosofía para consolidar el que ha sido el lugar tradicional de esta disciplina en la vida cívica y para que se perpetúe su vocación de universalidad al servicio de la diversidad cultural y de la paz en el mundo”. También, que se “refuerce la enseñanza de esta disciplina dentro de su país y alienten las iniciativas de actividades filosóficas de los distintos interlocutores de la disciplina”.
La celebración es un espacio para reflexionar sobre los desafíos de la región del Caribe en relación con el fortalecimiento de la democracia, el desarrollo sostenible, la desigualdad social, y el cambio climático. De igual forma, la Filosofía es fundamental para comprender la realidad del mundo actual y las implicaciones éticas en el campo de la inteligencia artificial y la ingeniería genética, el tema de la ciudadanía, los riesgos éticos que plantean la biotecnología y la nanotecnología, así como los efectos de la posverdad y el impacto de la globalización política, económica y cultural en cuestiones morales y la identidad nacional.
La Filosofía que promueve el desarrollo del pensamiento crítico es clave para abordar desde el Caribe el tema de la racialización, la caribeñidad, pero también para trabajar su influencia en los grandes procesos que ha vivido la región incluyendo las independencias y las revoluciones.
En un mundo marcado por el predominio del paradigma tecnocientífico y el modelo neoliberal donde cada vez más relegan de los planes de estudios de muchas universidades (incluidos diversos países del Caribe) las humanidades y por tanto la Filosofía; en el contexto de la celebración del Día Mundial de la Filosofa es necesario resaltar su relevancia en la comprensión de la sociedad del presente. Además, resaltar el llamado de la UNESCO a los Estados miembros a promover la Filosofía dentro de sus países y la necesidad de “reforzar la enseñanza de esta disciplina dentro de su país, promoviendo iniciativas de actividades filosóficas de los distintos interlocutores de la disciplina”.
En los últimos años los conflictos han ido creciendo a nivel mundial. Los conflictos en Libia, Siria y Yemen, provocado por las revueltas árabes de 2011, los efectos de la guerra azerbaiyano-armenia de 2020 por el enclave de Nagorno-Karabaj, los efectos del golpe de Estado en Birmania en 2021, la invasión de Rusia a Ucrania en 2022 así como el conflicto de Israel y Hamas, la situación en Sudán, Sudán del Sur, entre otros, es una muestra de la creciente tensión internacional y de la necesidad de luchar cada vez más por la paz.
En el Gran Caribe en mayor o menor grado también existen problemáticas que afectan la paz social, relacionadas con los efectos del narcotráfico, la violencia de las pandillas en Haití, la desigualdad social, el impacto de las migraciones, los efectos del cambio climático y las tensiones fronterizas y políticas. Frente a esta realidad es necesario recordar el papel de la Filosofía en el desarrollo de un espíritu crítico para comprender la realidad y su papel en la promoción de la tolerancia y la paz que son esenciales para el desarrollo de la humanidad.
Centro estudios caribeños. PUCMM.