El iluminismo en tanto corriente filosófica y plural va a traer consigo el primer crítico de arte moderno: Denis Diderot. Para este filósofo la razón tendrá una importancia singular, caracterizada por la búsqueda de conocimiento con fundamento científico.
Las críticas de arte publicadas por Diderot fueron alabadas por Goethe y se consideran una referencia inmediata sobre la estética del siglo XVIII, en su inclinación por el materialismo desde una perspectiva idealista y positivista.
Más adelante, tendremos noticias de Benedetto Groce, quien asumió el arte como expresión de los sentimientos y la separación de una indagatoria filosófica. También tenemos a Lionello Venturi, quien planteó que la falta de historicidad al emitir un juicio sobre bases consolidadas, lleva a la crítica de arte a estar frecuentemente sustentada en la intuición del crítico con el factor de riesgo que ello conlleva.
Al conocer algunos de los nombres que han estado vinculados a la crítica de arte, se puede apreciar que no es una disciplina tan reciente en el medio artístico, sin embargo, para muchos se trata de una modalidad completamente nueva y, que da lugar a malinterpretaciones. Así, porque muchas veces se entiende que la función del crítico es detractar la obra de arte, respondiendo esta concepción a una mala lectura del concepto.
Asumidos estos planteamientos, podemos afirmar que la crítica de arte, pasa a ser un compendio de los presupuestos aportados por cada uno de los autores señalados y otros no menos importantes. Los juicios de valor que estos pensadores han expresado a lo largo de la historia, nos permiten valorar el rol del crítico con más conciencia, entendido como el ente capaz de valorar una obra o conjunto expositivo, a partir de un análisis estructural teniendo como base la historia del arte, la estética en tanto filosofía de esta disciplina, los fundamentos de la forma y los estudios culturales.
La sensibilidad juega un rol determinante al momento de apreciar la obra para fines críticos, así como la experiencia, pues esto permite desarrollar un juicio más objetivo en torno a la obra, lo que supone una visión integral. Continuará.
