La industra musical dominicana recuerda hoy a una de sus figuras más queridas, Sonia Silvestre, fallecida hace cuatro años.
Sonia Margarita Silvestre Ortiz, su nombre completo, nació el 16 de agosto 1952, en un hospital de San Pedro de Macorís, donde su madre fue a dar a luz porque, aunque la familia vivía en Hato Mayor, allí no había un centro de salud adecuado en esos momentos.
Cuando aún era una adolescente se inició en el canto y desde entonces despertó la admiración por sus grandes cualidades vocales.
Después de participar en los festivales de la voz de entonces, su carrera despegó definitivamente con éxitos como “Dónde podré gritarte que te quiero”, “La tarde está llorando” y “El arañazo”. La calidad de su voz y su eterna sonrisa le granjearon la admiración de los dominicanos, que le consideraron como una de las mejores cantantes populares, y que sacrificó parte de su carrera internacional al abrazar causas políticas de izquierda en medio de la “Guerra Fría”. En la década de los noventa volvió a la cima de la popularidad de la mano de la bachata del cantautor Luis Días, con temas inolvidables como “Yo quiero andar” y “Mi guachimán”.
En los últimos años de su vida había sido designada en un cargo diplomático en La Habana, Cuba, por lo que pasaba en ese país buena parte del año. La artista falleció el 19 de abril de 2014, a los 61 años, luego de estar varios días hospitalizada por complicaciones causadas por dos infartos cerebrales.