La muerte de José José, el pasado sábado en un hospital de Estados Unidos, dejó a la canción de habla hispana sin una de sus voces más poderosas de los últimos 50 años, cuyo dueño fue una especie de potro que nadie domó, solo los años.
Es una idea de la pieza “Seré” que el compositor español Rafael Pérez Botija escribió para que el artista la cantara y cuya letra marcó la vida de “quien todo lo dio por triunfar dejando su vida al pasar hecha pedazos”.
“Su historia se presta para una novela de no ficción, porque no necesitas inventarle nada a un personaje como José José, quien cumplió con los derroteros del éxito para un mexicano. Le sucedió lo que sucede con el éxito: drogas, alcohol, mujeres; fue el gran representante del melodrama nacional encarnado en una espléndida voz”, aseguró a Efe el novelista Benito Taibo.
A sus casi 60 años, Taibo pertenece a una generación que entraba a la pubertad cuando José José cautivó a Hispanoamérica al cantar “El triste” en el Festival Mundial de la Canción Latina de 1970, y quedó hechizada por los encantos del llamado “Príncipe de la canción”.
“Tendríamos que recordarlo vestido de blanco cantando “El triste”. De joven yo estaba metido en el rock, sin embargo lo seguí y le tuve un respeto por su voz privilegiada”, confesó el escritor, uno de los principales promotores de la lectura en México.
Este día los críticos de música, los narradores y los poetas se ponen de acuerdo en reconocer la grandeza de un artista que según sus allegados nunca estuvo interesado en el dinero, aunque sí en las emociones fuertes, las que lo hicieron caer por un despeñadero. “Estamos hablando de más de 50 años en la canción; hizo Bossa nova, balada, bolero, pop latino y hasta grabaciones de música ranchera. Fue un tenor con un uso interesante de la octava, una voz que nunca parecía cansada”, explica el erudito Carlos Olivares Baró.
Según el crítico, José José fue un referente, pero limita sus explicaciones sesudas y prefiere poner al cantante en un altar más accesible, el que le construyeron sus millones de seguidores de varias generaciones.
“Me pregunto cuánta gente se enamoró mientras escuchaba a José José. La gente del pueblo le dio un título nobiliario y fue un gesto singular que lo bautizaran como el príncipe de la canción”, asegura.
La muerte del ídolo estaba anunciada. Hace años vivía en hospitales, triste como el protagonista de su canción primera, porque la vida le guardó un final cruel: no poder hacer lo que más amaba, cantar. Las emisoras de radio y los programas de televisión repetirán en los próximos días las canciones de José José. Algunas de las cuales serán mucho después de haber sido escritas, una de ellas el mejor epitafio para el más querido de todos, el potro domado solo por los años.
Actos en ciudad natal
México comenzó a despidir el sábado a José José, fallecido a los 71 años en un hospital de EE.UU., con un improvisado homenaje en el barrio en el que creció el artista, donde centenares de vecinos se agolparon para cantar las letras de la voz más romántica del país.
Tras conocerse la muerte del “Príncipe de la canción”, centenares de personas se acercaron a la colonia Clavería de Ciudad de México, donde una estatua honra la figura del que fuera su vecino más ilustre. Allí, los emocionados vecinos depositaron flores para honrar el artista, aunque el mejor homenaje fue el improvisado escenario en el que iban subiendo voluntarios para cantar los temas de José José, con los cuales se han enamorado generaciones enteras de mexicanos.
Desmiente secuestro de los restos de su padre
La hija menor José José, Sarita Sosa señaló que el legado del cantante mexicano vivirá para siempre y que “ya está en paz”. “Se fue dormidito, y estamos agradecidos que fue así”, reveló al programa “Al rojo vivo”, de Telemundo. También, desmintió que tenga secuestrados los restos de su padre, y que los demás hermanos saben muy bien dónde están. “Ellos están bien conscientes de que en el momento en que él falleció yo les llamé, porque, aparte de las diferencias que tenemos, en estos momentos hay que estar unidos. Ahora, que ellos salgan a decir otra cosa eso es ellos. Mi deber, como hija y como hermana, es avisarle lo que pasó con su papá y que debemos estar unidos”, sostuvo. Otros hermanos han expresado a través de medios de comunicación que no les han dicho dónde están los restos de su padre, José José. “Ellos saben dónde está su papá; están muy conscientes, y hay pruebas de que saben dónde él está…”, afirmó Sarita.
Preparan gran despedida
La hija de José José confirmó el deseo de la familia de realizar varios actos de despedida en México y en Miami para que todos sus fanáticos puedan asistir.
“Estamos haciendo todo lo posible para que el pueblo se pueda despedir de él”, confirmó Sarita durante la entrevista concedida a la periodista María Celeste Arrarás.