En tiempos actuales es muy difícil que una publicación llegue a 100 ediciones, sobre todo con un alto contenido de pensamiento.
Probablemente la revista Global sea una de las publicaciones con más persistencia de el Caribe, al menos en lo que va de siglo. Existir en una época en que desaparecen publicaciones periódicas impresas a ritmo vertiginoso es una heroicidad que hay que aplaudir.
Global arriba a su edición centésima. Lo hace con una gallardía, dignidad y una altura intelectual, que obliga a sentirse agradecido de su existencia.
El director de la revista José Rafael Lantigua, con la venia del presidente fundador Leonel Fernández, ha tenido a bien dedicar este número tan especial, correspondiente a los meses mayo-junio del 2022 (esto de los atrasos es algo bastante normal en las publicaciones periódicas del continente), a la figura más alta de la literatura dominicana: Pedro Henríquez Ureña.
No se trata de una apología al escritor y maestro que murió mientras viajaba en un tren entre Plaza Constitución y el Colegio Nacional de La Plata -“Así murió Pedro: camino de su cátedra, siempre en función de maestro”, escribió sobre él su hermano Max-, sino un homenaje-invitación a repensar su realidad y la nuestra, en ocasión del centenario de “La utopía de América”, conferencia brindada en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, a las 5:30 pm del 14 de octubre de 1922.
¿Cien años después sigue viva la utopía de América?
Autores participantes
La reflexión va con firmas como las del periodista cultural argentino Carlos María Romero Sosa, de la ensayista coterránea suya y ganadora del Premio Internacional Pedro Henríquez Ureña, Beatriz Sarlo.
También del escritor chileno Bruno Lloret, la salmantina Carmen Ruiz Barrionuevo, experta latinoamericanista; así como el ensayista dominicano radicado en Canadá Néstor E. Rodríguez. Además el investigador literario colombiano William Martín Osorio, quien recuerda sus sistema de relaciones personales con sus alumnos Enrique Anderson Imbert, Ernesto Sábato y Ezequiel Martínez Estrada. La también salmantina Eva Guerrero Guerrero centra su atención en la visibilización de la mujer en la obra de Pedro.
Autores dominicanos en el número 100
Bruno Rosario Candelier aborda lo filológico en Pedro Henríquez Ureña. Miguel D. Mena aportó no solo su invaluable colección fotográfica sino también un acercamiento a cartas entre Emilio Demorizi y Juan Jacobo de Lara y Demorizi y Max Henríquez Ureña. Soledad Álvarez recuerda en su texto los diálogos de Pedro en México, Estados Unidos, España, Cuba o Argentina. De colofón una entrevista a Pedro José Ortega, experto en Pedro.