Son incontables las personalidades del arte y el espectáculo que en su época de gloria alcanzaron un rotundo éxito, pero que nunca han obtenido uno de los galardones más codiciados que entrega la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), con el patrocinio de la Cervecería Nacional Dominicana.
Paradójicamente, el mundo del espectáculo se torna sorprendente. No obstante, en la ceremonia de los Premios Soberano 2017, que se celebran el próximo 28 de marzo en la sala Carlos Piantini del Teatro Nacional Eduardo Brito, algunos artistas que nunca han sido premiados buscarán romper con ese maleficio. ¿Qué ha pasado con estos artistas locales que no fueron premiados y/o recibieron un reconocimiento en el momento justo de la gloria de su carrera? Es la pregunta de muchos y que a veces no encuentra respuesta.
Algunas de las principales figuras de los años 80, como el cantautor Ney Nilo, intérprete de éxitos como “Paloma dime por qué” y “La carta”, nunca sonaron en una premiación que reconociera su talento y su aporte musical.
Otra de esas luminarias es Fausto Rey, cantante romántico por excelencia de la República Dominicana, que pese a su pegada en la década de los 70 y principios de los 80, tampoco posee una estatuilla en algún rincón de su casa, según se puede consultar en el libro Premios Soberano: Récord de categorías, nominados y ganadores, una obra editada por el periodista y ex presidente de Acroarte, Máximo Jiménez, disponible en Amazon en formato e-book. “El Niche”, como se conoce a Fausto Rey, fue intérprete de temas como “Yolanda” “Guadalupe”, “Loco dicen que soy”, “Lisa” y “Vete de aquí”, entre otros, que conforman una cantera de éxitos de su repertorio y que fueron la plataforma de su popularidad. Rey es señalado en la reducida lista de los artistas criollos que han llenado el Estadio Olímpico Félix Sánchez de Santo Domingo.
A pesar de que algunas figuras, como es el caso de Luis Segura, quien es sindicado entre los pioneros del género bachata, han sido distinguidas en el marco de la ceremonia de los antiguos premios Casandra, y el merenguero Bonny Cepeda, quien en la edición del año 2014 recibió un Soberano especial por los 30 años de su carrera, ninguno de los dos ha sido premiado en competición a nivel de nominaciones. Y quién se imagina que un cantante de la envergadura de Alex Bueno, que ha pegado en géneros como el merengue, balada, bachata y salsa, no ha conquistado un premio de Acroarte.
Luego de integrar el grupo de Fernando Villalona, Alex Bueno, oriundo de San José de las Matas, despuntó en el año 1982 con su proyecto La Orquesta Liberación, tras la cual popularizó “Colegiada”, “Querida”, “Esa pared”, “La radio”, y “Jardín prohibido”, entre otros éxitos.
En 1992, El Mayimbito, como también se le conoce, rompió récord de venta con “Ternura”, su primer disco de bachata, con el que comprueba su calidad vocal e interpretativa y se consolidó como artista internacional.
Siguiendo en el género merengue, Carlos Manuel “El Zafiro”, en su época de ensueño tampoco fue objeto de un reconocimiento en los Premios Casandra, ahora Soberano. El género salsa tiene un representante criollo de gran proyección internacional que tampoco figura en la lista de ganadores: Raulín Rosendo.
También la bachata tiene un gran perdedor dentro de su género, Luis Vargas, quien a pesar de cosechar tantos éxitos durante su trayectoria nunca ha ganado en las premiaciones locales, a pesar de que ha sido nominado varias veces.
Tati Salas, baladista femenina dominicana, destacada por su participación en los festivales de la Canción Iberoamericana y el Festival Oti, en el cual se alzó con el segundo lugar en 1982, nunca fue premiada en el marco de los premios más importantes de su país.
Juan Lanfranco, una de las voces románticas de la discografía criolla que en los 80 ganó popularidad con temas como “El amor es libre” y Delirante amor”, no exhibe uno de estos galardones.
Artistas del género tropical, dentro de los que podemos mencionar a Jandy Félix, intérprete del género fusón y destacado por su éxito “Amor lunático”, el cual grabó en la agrupación de Chichí Peralta, tampoco ha ganado.
Cheo Zorrilla, prolífero compositor, autor de temas como “Apocalipsis” y “Los hombres también lloran”, quien el pasado año entró al Salón de la Fama de los Compositores Latinos, nunca ha sido distinguido con el Soberano.
En el área de la televisión y la comunicación se puede mencionar al humorista Irving Alberty, quien a pesar de que ha sido nominado tres veces, hasta ahora no ha obtenido una estatuilla de dichos premios.
Nikauly de la Mota tampoco ha sido distinguida con el codiciado premio. Lo propio le ha ocurrido a los comunicadores de Santiago, Brenda Sánchez y Nelson Javier. Un dato curioso es que “El Cocodrilo” estuvo a punto de alzarse con su primer galardón, pero le fue retirado luego de que Acroarte alegara que lo recibió por “error” en la ceremonia (2009).
Los que nunca han ganado
New York Band, La Gran Manzana, Ney Nilo, Raulín Rosendo, Bonny Cepeda, Fausto Rey, Aníbal Bravo, Monchy Capricho, Luis Segura, Luis Vargas, Yoskar Sarante, Tati Salas, Carlos Manuel “El Zafiro”, Alex Bueno, Hansel, Santiago Cerón, Darihana, Belkis Concepción, Diómedes y El Grupo Mío, Cheo Zorrilla, Juan Lanfranco, Jandy Félix, Roy Tavaré, José Bello, Luis Ovalles, Omar Franco, Tribu del Sol, Marcos Caminero, Nikauly de la Mota, Nelson Javier “El Cocodrilo” y otros tantos que no están en este grupo tampoco disfrutan del trofeo. Figuras fallecidas como Jochy Hernández, Benny Sadel y Ángel Haché no lograron conquistar una estatuilla.