Más que un instagramer, Carlos Junior Alba Montesquieu, mejor conocido como Carlos Montesquieu, es camarógrafo, editor de videos, luminotécnico y tramoya, oficios que ha aplicado a la labor de entretenimiento que desempeña en las plataformas digitales.
Por mucho tiempo laboró para la televisora BVTV Bávaro, pero desde el 2011 probó el sabor de los “likes” y “vius” en YouTube con su primer video viral, “Cristiano de la secreta”, una parodia de los “evangélicos”. Sin embargo, pese a la repercusión que lograban sus audiovisuales, Montesquieu estaba ajeno de lo que pasaba en su vida. “En ningún momento pensé que iba a vivir de las redes sociales, yo estaba pegado y no lo sabía. Me di cuenta cuando le puse atención al asunto monetario. Yo tenía un año y medio haciendo videos y los demás youtuber, como Ingrid Gómez, me decían que yo podía sacarle más provecho”, recordó.
Contó que la primera monetización que recibió de YouTube fue de 400 dólares y desde entonces decidió darle carácter y seriedad a su proyecto, a tal punto que en la actualidad no se imagina en un mundo sin las redes sociales.
Sobre el contenido explícito de sus videos, el joven (29 años) entiende que eso es lo que vende y que si él cambia, “de todos modos habrá otros que lo harán porque es una forma diferente de entretener a las personas”. En ese sentido, llamó a los padres a bloquear las redes y páginas que entiendan que no llevan un buen mensaje a sus hijos menores. “Yo lo que hago es comedia, tal vez puede motivar a algún joven a ser influencer con otra temática, algo que no tenga que ver con mi línea, que es humor negro –sin límites-”, consideró Carlos, que es padre de una niña de dos años.
Se arrepiente
Al recordar el episodio del 2016, cuando corrió desnudo con la bandera nacional en manos en el Estadio Quisqueya, momento en que se celebraba la Serie del Caribe, dijo que se arrepiente del hecho y que no lo volvería a repetir. “Aquí no lo volvería a hacer, porque es algo que todavía estoy pagando. Aun me queda la duda si positivo o negativo hacerlo, porque a la fecha no he podido viajar”, dijo el instagramer que reside en Punta Cana.
La familia es intocable
Lejos de la imagen “loca” que proyecta en las redes, Montesquieu tiene su cabeza bien puesta en asuntos familiares. Es estable en ese sentido (tiene 10 años con su pareja) y para él “la familia es intocable”. A pesar del éxito, no quiere que sus hijos sigan su línea de trabajo en el futuro.
Le da forma a su proyecto discográfico
Luego del éxito que tuvo el tema “¿Qué hago, me mato?”, que grabó con el urbano Bulin 47, Carlos Montesquieu lanzará su proyecto musical. “Duré mucho tiempo preparándome, porque no pienso quedarme a nivel local”, dijo. Para iniciar, montó un estudio en su casa, armó un equipo de trabajo y ya ha grabado algunos sencillos. Dos de ellos son con Químico Ultra Mega, titulados “Yo me pegué”, en bembow, y “Ando fresh”, a ritmo de trap.