Consciente de su misión, el pastor rechazó codiciables candidaturas, y se dedicó en cuerpo y alma a su ministerio.
Los bancos de la iglesia eran un entretenimiento para el niño Ezequiel, en los que entrenó mil y una formas de escabullirse tras aruñar las piernas de las hermanas en la fe.
Con el tiempo, el muchachito travieso se convirtió en un jovencito audaz para memorizar textos sagrados, habilidad que le permitió ser el campeón de la escuela bíblica de su congregación.
A la edad de 13 años ya tenía una visión muy clara de su misión como miembro del cuerpo de Cristo: quiero ser un predicador se decía y antes de cumplir los 14, recorría barrios de la capital con el mensaje de buenas nuevas del Evangelio.
No pasó mucho tiempo para que la vida lo encaminara a otros propósitos de mayor compromiso, una circunstancia particular lo llevó a pastorear una feligresía cuando apenas cumplía los 16.
Hoy, a sus 77 años, dueño de un cimentado conocimiento en las sagradas escrituras y de firme posición, el pastor Ezequiel Molina Rosario es uno de los líderes más influyentes de la iglesia evangélica en la República Dominicana y cabeza del sólido ministerio “La Batalla de la Fe”.
elCaribe te trae diez momentos memorables de su vida, desde la influencia que tiene de su abuela, fundadora de la primera iglesia evangélica en La Romana, hasta las propuestas más tentadoras que dice ha recibido de sectores políticos.
- El ejemplo de la madre
Soy el mayor de 11 hermanos. Nací en la ciudad de La Romana en 1944. Mi madre murió, cuando yo tenía 22 años, más tarde mi padre se casa de nuevo. Vengo de una familia muy humilde, mi padre era original del Bejucal de Higüey; y mi madre de San Pedro de Macorís, pero se juntan en La Romana, forman su familia y nazco yo. Mis padres eran cristianos. Recuerdo que siempre mi madre hacía un esfuerzo extraordinario para llevarnos los domingos en la mañana a la escuela bíblica de la Iglesia Evangélica Asamblea de Dios. Era un ajetreo porque éramos cinco muchachitos que se llevaban un año y pico. - La hermosa costumbre
Era una hermosa costumbre ir todos los domingos temprano a la escuela bíblica. Yo era muy travieso, molestoso en la iglesia y en la casa. Vivía debajo de los bancos, aruñaba a las hermanas en las piernas, cuando los diáconos, los líderes de la iglesia, venían a agarrarme por un sitio, yo salía por otro. Yo me crié en la iglesia molestando, por eso les digo a los hermanos que lleven a los niños a la iglesia, aunque molesten, porque yo me crié molestando, pero ya cuando tenía 12 a 13 años era el campeón de la escuela bíblica, me lo sabía todo. - Una abuela de armas a tomar
Mi abuela, llamada Andrea Rosario, fue mi ejemplo en el evangelio, era una señora que venía de momentos de conflictos. Era prima hermana de un legendario que enfrentó a Trujillo, Ramón Natera. Ella me contaba que iba a lavar al río con dos pistolas. Luego ella se convierte y se va a La Romana. Era una mujer revolucionaria, se convierte en San Pedro y es la primera evangélica que llega a La Romana. Tuvo total incidencia en la primera iglesia evangélica en La Romana. Ella fue la primera que predicó ahí en 1930 y pico. Su casa era la casa misionera. Me acuerdo de ella desde la pela que me daba hasta el arroz blanco que cocinaba, porque la comida de ella era la que me gustaba. Estuve en La Romana hasta los ocho años, luego mis padres se trasladaron a la ciudad de Santo Domingo. Caí en una escuela pública en Villa Consuelo, luego paso al intermedio y entró al Liceo Argentina. - Un llamado divino
En una campaña en el Estadio La Normal, como en 1956, vino un predicador llamado David García, de Puerto Rico, y el último día, yo tenía como 13 años, él hizo un llamado a los jóvenes y adolescentes que sintieran el deseo de involucrarse en el ministerio y desde ahí yo sentí que tenía una misión. Entendí perfectamente lo que iba a ser, un predicador, y me involucré inmediatamente, ya iba con los muchachitos para Guachupita y otros barrios, ya a los 14 años era predicador. - Pastor a los 16 años
Un día había una actividad en otra iglesia, que no era donde yo asistía, el pastor me encargó a mí la representación con un grupo de muchachos y me dijo que predicara y a partir de ahí es que encuentro que todo se definió.
Se presenta una situación, una iglesia se quedó sin pastor, entonces me llevan a mi como taponero, ahí duré unos meses. A los 16 años yo estaba instalado en una iglesia pastoreando en San José de Ocoa.
A los pocos meses de estar predicando, cuando me instalaron en San José de Ocoa, yo sabía que era pastor. A mí no me profetizaron, simplemente yo entendí lo que debía hacer.
Ya en 1962, yo tenía 17 años, me instalan en el sector ensanche Espaillat, esa iglesia la comenzamos nosotros, Iglesia de Dios Pentecostal se llamaba, ahí estuve como 11 años.
Yo tenía desde chiquito educación bíblica. No había faltado a la escuela dominical nunca, porque en ese tiempo se estudiaba bastante la biblia, yo tenía buenos mentores, también, el hermano Ercinio Rodríguez, líder de jóvenes de la Asamblea de Dios en la Duarte, él dirigía a los muchachos y nos llevaba a los sitios a predicar y Francisco Hernández.
Me casé a los 20 años con Dominga Sánchez. Tenemos 57 años casados y cuatro hijos, todos en los caminos del Señor. - La radio
Yo soy empírico, la radio me obligó a estudiar. Nosotros tenemos en la radio más de lo que tengo de casado. La Batalla de la Fe este mes de julio cumple 59 años. La Batalla de la Fe comienza como un programa de radio. Entonces nosotros los que iniciamos el programa éramos estudiantes y sin nadie enseñarnos hacíamos guión, escribíamos los mensajes. Esto era dos veces a la semana, jueves y domingo.
En 1963 entramos en una coyuntura especial. A una hermana (en la fe) le entregan un espacio radial, era una señora que trabajaba de doméstica. Ella entra al espacio y no encuentra qué hacer, entonces nos llama y nosotros, Demetrio Montero y yo que éramos como hermanos, ambos predicadores, empezamos en radio, y así comienza La Batalla de la Fe. - Concentración nacional
Varias veces ha pasado que uno cree que esa es la última concentración, y los últimos dos años han sido catastróficos. Por ejemplo, el 2021 no se pudo dar en el estadio, tuvimos que darla aquí (iglesia) a puertas cerradas con los camarógrafos y sonidistas, yo prediqué sin gente y la del 2022 fue con restricciones, las dos más recientes fueron las más difíciles.
La concentración nacional comienza en la iglesia que yo pastoreaba en la avenida Central del ensanche Espaillat. La que viene es la número 59, de las cuales he predicado como 50.
Los primeros tres años se hizo en la iglesia donde yo era pastor, cuando ya no cabían ahí, fuimos a iglesias más grandecitas. En el año 1975 entramos al estadio La Normal. Estuvimos frente a Radio Televisión Dominicana, Estuvimos en el Palacio de los Deportes, en 1978, y al Estadio Olímpico llegamos en 1981.
Hemos tenido que enfrentarnos con políticos y no propiamente políticos. Varias veces tuvimos encontronazos con el Ministerio de Deporte porque no querían esa celebración y nos ponían dificultad. - Casi se rinde
Volver al mundo nunca me ha pasado por la mente, pero dejar la actividad, el ministerio, sí, por las situaciones económicas.
Una vez celebramos el 30 aniversario, hace 29 años, y yo no hallaba con que pagar el combustible de la planta que usamos, la hicimos frente al Estadio Olímpico, porque no nos permitieron hacerla adentro. Entonces cayó agua y se nos dañaron los equipos, ahí me rendí y dije no puedo con esto. - Momento más difícil
Quizás lo más difícil fue un problema de salud en la misma concentración, en esa actividad hay mucha presión, está la del sol, la espiritual y la presión emocional, porque no es fácil pararse en una multitud con un compromiso, y aunque mucha gente no lo entienda hay una presión espiritual, hay un equipo diabólico trabajando en contra y él que está al frente de la actividad lo siente.
A mi me llega la inspiración del mensaje, hay tres enfoques, está el social, el político y el de la iglesia. El que lleva el mensaje debe tener en cuenta las necesidades del auditorio y dar el remedio y el consejo, no me puedo concentrar solo en lo político, ni solo en lo social, ni solamente en la iglesia, son tres grupos que convergen (cada primero de enero) en el estadio y en la televisión y que están esperando una palabra. - Propuestas no lo desenfocan
Había un tabú en los evangélicos de que no podían compartir con los políticos, entonces en el 1981 empezamos a invitar a los políticos en los años 1981-1982 estuvo el profesor Juan Bosch, él habló y todo, el año siguiente fue Peña Gómez y ahí siguieron yendo, los demás. Leonel como presidente no fue, antes de ser presidente sí, Danilo fue dos veces, Balaguer no, por las situaciones físicas, pero mandaba su gente. Abinader en 2021 mandó una nota grabada.
He recibido varias propuestas. Hace 25 años, el partido reformista me propuso una diputación, yo lo evadí, decían que eso era un clavo pasado. Le dije que lo sentía pero que no podía complacerlos, entonces creyeron que lo encontré poco y me propusieron la senaduría en el mismo año.
Yo no siento eso… Mucha gente me ha hecho propuestas de diferentes partidos PRD, PLD, directamente el PRM no me ha hecho. Yo asesoro y aconsejo a todo el que quiera, pero no entro.
Yo quiero que me recuerden como un imitador de Jesucristo, en todos los caracteres de Jesucristo, manso, trabajador, humilde, recto, agresivo con lo que entiende, que no transige sus principios; así como Cristo entró al templo con el látigo en la mano, eso es lo que yo pretendo seguir”.
Ministerio radial cumplirá 60 años
La Asociación Misionera Radial La Batalla de la Fe desempeña desde hace más de 50 años el rol de promover la doctrina cristiana a través de los medios de comunicación y la realización de eventos multitudinarios. La Batalla de la Fe cuenta con la emisora radial Radio VEN “Voz Evangélica Nacional” en sus diferentes frecuencias, ubicadas en la provincia Santo Domingo (1200 am) y las regiones Este (105.5 FM), y Sur (92.9 FM) del país. El ministerio es pionero en la comunicación cristiana dominicana, brindando información, educación y ejerciendo la promoción de los principios cristianos.
Honra
Volvamos a los valores que nos dieron origen, no nos olvidemos de Duarte, porque hay una tendencia a olvidarse de Duarte, de la bandera, del escudo y de nuestra nacionalidad.
Elevar valores
“A la iglesia que mantenga la bandera del evangelio en alto porque es la bandera de los valores, y que se mantenga firme”
Que vengan los niños
Yo me crié en la iglesia molestando, por eso le digo a los hermanos que lleven los niños a la iglesia, aunque molesten”
Los políticos
Había un tabú en los evangélicos de que no podían compartir con políticos, entonces en 1981 empezamos a invitarlos a la concentración”
Lucha espiritual
No es fácil pararse en una multitud con un compromiso y, aunque mucha gente no lo entienda, hay una presión espiritual”
