Santiago. Pese a que los indicadores en países donde hay medicina familiar y comunitaria muestran que ha cambiado la calidad de vida, aquí esta rama continúa rezagada, no obstante estar contemplada en la Ley de Seguridad Social.
En el caso de Santiago, donde cada año egresan más de 15 especialistas de la Escuela de Medicina Familiar del Hospital Juan XXIII, sin contar los que hacen la especialidad fuera del país, en centros privados apenas hay dos consultorios de medicina familiar y comunitaria, de acuerdo a datos suministrados por el doctor Luis Faringthon Reyes, presidente de la filial del Colegio Médico Dominicano. “Es una especialidad poco valorada, ya que su mayor radio de acción es el de atención primaria y como en el país no se ha iniciado este nivel de atención, en la ciudad de Santiago ubicados en centros privados tenemos alrededor de dos consultorios de medicina familiar y comunitaria, pero hemos visto en algunas zonas consultorios externos independientes de medicina familiar”, dijo.
Pocos avances
Ronit Hernández, presidenta de la Sociedad Dominicana de Medicina Interna, asegura que esto es una cuestión de política de Estado, ya que la atención primaria debió arrancar en el año 2000, pero no ha sido así, porque el Sistema de Seguridad Social necesita más de dos mil médicos de familia y no hay esa cantidad de egresados todavía, y los existentes no están en atención primaria.
Otro problema que enfrentan los médicos de familia y comunitarios es que las Administradoras de Riesgos de Salud no reconocen su ejercicio, negándose a asignarles un código para atender a los afiliados del Sistema Dominicano de Seguridad Social, por lo que la sociedad que los agrupa, “está librando una lucha titánica” para conseguirlos, con el apoyo del CMD, de acuerdo a lo expresado por Hernández.
Hay más garantía de vida para los que la reciben
Hernández dijo que donde más consultorios a nivel privado hay es en San Pedro de Macorís. “En países como Canadá y España, donde se ha aplicado la atención primaria, hay mejor calidad de vida, pues el médico familiar es el especialista que ve a los pacientes de una forma integral y especializada, y es capaz de resolver del 85 al 90 por ciento de los diagnósticos ”, precisó.