El término hace referencia a la capacidad para identificar, entender y manejar las emociones correctamente, de un modo que facilite las relaciones con los demás
Dos términos se mantienen en boga desde hace ya algún tiempo y ambos van de la mano: inteligencia emocional y coach de vida. Su permanencia podría ser indicativo o testimonio de su auge.
Cada vez más, escuchamos hablar de personas que no logran controlar sus emociones, y en ocasiones hiper reaccionan a situaciones cotidianas que constituyen el diario vivir. O bien, no saben expresar lo que sienten y no logran encontrar explicación a sus desordenes emocionales que pueden ir de un extremo a otro.
Así como hay personas que tienen entrenadores personales a la hora de ejercitarse físicamente, hay quienes precisan de un coach de vida para aprender a manejar sus emociones, sus sentimientos, sus reacciones, en fin, su inteligencia emocional.
Ese viene a ser el rol del coach de vida, entre otros afines, ayudarnos en el manejo de nuestras emociones. Ser inteligentes emocionalmente hablando.
¿Qué se conoce por inteligencia emocional? Según la especialista una cualidad que nos capacita para relacionarnos con nosotros mismos y nuestro entorno, y nos capacita para aprender a pensar antes de actuar, controlando lo que pensamos, controlamos nuestro modo de actuar. “Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno. Con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo”, Aristóteles.
A partir del año 1990, Salovey y Mayer introdujeron el término Inteligencia Emocional en la literatura científica; que es la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los ajenos, de motivarnos y de manejar adecuadamente las emociones, en nosotros mismos y en nuestras relaciones.
En realidad es un concepto muy antiguo, Aristóteles, Charles Darwin, Thorndike Skinner, David Whechsler todos ellos se refirieron y estudiaron ampliamente el concepto de inteligencia, y su estrecha relación con el conocimiento y control de los sentimientos. Coincidiendo en la importancia de conocer y saber manejar las propias emociones para la supervivencia y adaptación del ser humano.
“Todos tenemos la posibilidad de manejar, en bastante grado, los sentimientos propios y los ajenos. Los sentimientos podemos modelarlos bastante bien, para favorecer una acción y/o entorpecer otras. Pero, tanto la envidia, el egoísmo, la agresividad, la crueldad, la desidia son carencias de una adecuada educación de los correspondientes sentimientos que afectan decisivamente las posibilidades de una vida feliz”, explica Nathalie Bello Estrella, psicóloga, terapeuta sexual y de parejas.
Asegura que cuando estamos en control para identificar nuestras emociones, tenemos la opción de comparar las diferentes sensaciones. Cuando nos hacemos conscientes de nuestras emociones, tenemos la capacidad para guiar acciones, tendentes a la toma de decisiones acertadas.
“Inteligencia emocional es un conjunto de habilidades, no solo de las emociones y sentimientos, sino también, el control de los impulsos y ansiedad; que nos permite regular nuestro estado de ánimo, ser optimista ante las frustraciones, nos estimula a estar motivados, dando como respuesta a una persona empática, dice Bello Estrella, especializada en abuso y maltrato, y en desórdenes alimenticios. En general, las habilidades emocionales se relacionan con la felicidad, el funcionamiento social, el bienestar y la importancia de desarrollar fortalezas positivas y habilidades socios emocionales.
Pero, ¿es posible aprender a ser feliz? “Sin entrar en argumentos científicos, la felicidad es un estado de ánimo o de aptitud voluntaria, cuyo objetivo es incrementar y mejorar el bienestar personal, analizando, conociendo, trabajando y proyectando las fortalezas, virtudes y destrezas individuales. Cuando decides analizar tus emociones, tus reacciones, a diferentes estímulos o situaciones, te colocas en control de tu vida, viendo desde afuera un universo de opciones para alcanzar tus metas “explica.
En la actualidad, el modelo de coaching, ontológico, de vida, empresarial y gerencial, es una herramienta de “acompañamiento” al logro de metas definidas objetivamente; donde inducimos al cliente a conocer, explorar sus emociones y sentimientos, sus reacciones, y lo ponemos en el camino a trabajar su inteligencia emocional. Es la forma creativa que les invita a revisar su propia visión del mundo, haciéndoles conscientes de sus bloqueos, reacciones, limitaciones fisiológicas, emocionales e intelectuales, por lo general, impuestas por la misma persona. “Cuando te haces consciente de tus emociones te colocas en una posición de control, y en ese sentido te acompañamos a redefinir tus objetivos, reforzando tu autonomía, tu motivación, tu auto confianza, haciéndote responsable de tu propia vida, tus acciones y tus propios recursos”, asegura Bello Estrella.
Si bien todos venimos al mundo con un “temperamento determinado”, ni la naturaleza innata, ni la influencia de la temprana infancia, ni los acontecimientos, constituyen determinantes irreversibles de nuestro destino emocional, amplia.
Las puertas para la alfabetización emocional, para cambiar hábitos, para explorar tus declaraciones, para eliminar tus propios obstáculos, para hacer cambios drásticos, siempre están abiertas, razón por la cual la profesional exhorta a buscar ayuda a todo aquel que sienta la necesita.