¡Todavía! Todavía nuestra propuesta de defensa de la gente trabajadora no consigue romper las barreras que los políticos mañosos han instalado en un sistema político dominado por el clientelismo, el dinero mal habido, las traiciones y la manipulación de las necesidades más básicas de nuestro pueblo.
Todavía nuestras voces, firmes, decididas y comprometidas con la defensa y promoción del bien común, no terminan de superar las trampas que los mañosos instalan en los centros de votación y las juntas electorales para impedir la expresión democrática de la voluntad popular.
Todavía no hemos cumplido con el objetivo de llevar a la Cámara de Diputados nuestro proyecto de dignificar los salarios y las condiciones de vida de toda la gente trabajadora de nuestra amada República Dominicana.
Todavía nos faltan algunos pasos para llegar al Congreso con el mismo calzado con el que recorrimos cientos de calles, callejones, avenidas y esquinas de nuestra comunidad de San Isidro, El Bonito, Santo Domingo Este, Boca Chica y Guerra.
En San Isidro nuestra propuesta fue la segunda más respaldada, y en todas las regiones de la circunscripción más grande del país conseguimos generar emociones, compromiso y votos.
Pero todavía debemos continuar en la lucha por nuestros derechos más básicos, fortalecer nuestros equipos en cada comunidad y trabajar sin descanso para que en el Congreso, en los ayuntamientos y toda institución pública se escuche, se respete y se proteja a la gente trabajadora, a los pequeños y medianos empresarios, y a sus familias.
Todavía, por el bien común, nos toca seguir haciendo política como soñamos la política: en base a principios, compromisos y propuestas.
Mil gracias a quienes, por dos meses, me acompañaron de manera desinteresada desde la madrugada hasta el toque de queda de cada día; a mi esposa María Teresa Morel por el respaldo y por asumir todas las responsabilidades del hogar mientras estuve ausente; al Frente Amplio y a Juan Dionicio Rodríguez Restituyo por su enorme acogida; a Manuel Salazar y a mi admirada profesora María Teresa Cabrera; a quienes donaron recursos a la campaña; a nuestro movimiento Bien Común; y de manera especial a la comunidad de San Isidro-El Bonito, por respaldar de forma abrumadora nuestra propuesta en las urnas.
¡Todavía… seguimos!
Jhonatan Liriano
Santo Domingo Este, jueves 9 de julio 2020