Fueron sepultados en el cementerio de Cristo Rey este sábado los restos del sargento de la Policía Nacional que se quitó la vida porque no podía costear el costo de un trasplante de hígado para su hijo.
Familiares y amigos acudieron al entierro, entre lágrimas y sufrimiento expresaron que el sargento Jorge Aquino recibía presión de la madre de su hijo enfermo.
De acuerdo a varios testimonios, Aquino presentaba problemas emocionales y otras veces había intentado suicidarse.
Dijeron además que el miembro del cuerpo del orden tenía tres niños .
Los familiares del fallecido manifestaron que no emprenderán ninguna acción legal en contra de la expareja del agente policial.