Moscú, 25 jun (EFE).- Las nuevas sanciones impuestas por EEUU a Irán se parecen a las implementadas contra Irak en 2003, lo cual es una señal alarmante para Moscú, declaró hoy el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov.
“Estamos preocupados con lo que sucede. Las últimas sanciones, de carácter estrictamente personal, anunciadas por la Administración (del presidente Donald) Trump contra altos dirigentes de Irán son alarmantes y nos envían una señal de que la situación se desarrolla en base a un guión muy malo”, afirmó en una rueda de prensa tras reunirse con su homólogo de Maldivas, Abdulla Shahid.
El presidente de EEUU, Donald Trump, impuso este lunes “duras” sanciones al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, mientras insistía en su oferta de negociar con él y advertía de que su “contención” ante las tensiones en el golfo Pérsico no durará para siempre.
Esta situación, señaló el ministro ruso, le recuerda al año 2003, cuando el entonces secretario de Estado de EEUU Collin Powell presentó una probeta como prueba de la supuesta existencia de armas químicas en la nación árabe y cuando EEUU introducía continuamente sanciones contra Sadam Hussein e Irak en general.
“Recordamos en qué terminó todo”, indicó.
Lavrov calificó de infundadas las acusaciones de Washington sobre el vínculo iraní con los recientes ataques contra buques cisterna en el estrecho de Omán, y aseguró que Moscú aboga por una investigación objetiva de los incidentes ocurridos en mayo y junio.
El jefe de la diplomacia rusa señaló que Rusia se opone categóricamente a “culpar en ausencia de pruebas” a nadie.
“Las fotos borrosas que presentaron los estadounidenses, los vídeos borrosos, no han sido aceptados como pruebas infalibles no solo en Europa y en Rusia, sino que tampoco en EEUU”, subrayó.
Según el ministro, los expertos independientes valoran de un modo crítico las pruebas presentadas.
Además recordó que tras los debates en el Consejo de Seguridad de la ONU no se apoyó la iniciativa de EEUU de vincular directamente a Irán a estos incidentes. EFE