Como parte de las actividades de la campaña “Necesitamos a todo el mundo para eliminar la violencia contra la niñez”, World Vision realizó el conversatorio Cambiando los paradigmas de crianza, cuyo objetivo es continuar impulsando un cambio en los métodos de disciplina violentos, por una crianza basada en el respeto, el amor y el diálogo.
Esta actividad fue el cierre de una serie de 15 conversatorios, efectuados en diferentes puntos del país con padres, madres, líderes comunitarios y religiosos, autoridades locales y docentes, para promover una crianza con ternura. En la apertura del panel se presentó un resumen de las conclusiones de estos conversatorios.
El panel estuvo integrado por la doctora Anna Grellert, asesora de Niñez y Desarrollo de World Vision América Latina y Caribe; la terapeuta familiar y presidenta del Centro para el Desarrollo y la Interacción Constructiva (Cedic), Rafaela Burgos, y el director de World Vision, Juan Carlo Ramírez, con la moderación del comunicador Reynaldo Infante.
La movilización de World Vision para eliminar la violencia hacia la niñez se realiza de manera simultánea en más de 60 países. En República Dominicana se concentra en la erradicación del castigo físico en los hogares, ya que se trata de una forma de violencia culturalmente aceptada, que afecta al menos a seis de cada diez niños y niñas en el país.
World Vision promueve que la ternura sea asumida como un elemento esencial para la crianza de los niños y las niñas, no sólo en el núcleo familiar, sino también en la escuela y comunidad, incluso en la esfera pública, a fin de hacer un compromiso colectivo.
¿Por qué el castigo físico?
El castigo corporal es una de las formas más comunes de violencia contra niños, niñas y adolescentes en República Dominicana, debido a que las llamadas “pelas” son una forma de disciplina culturalmente aceptadas y que no están penalizadas en la legislación nacional.
A pesar de que más del 90% de los padres dice estar consciente de que el castigo físico no es la mejor opción para disciplinar a sus hijos/as, el 63% de los niños y niñas de entre uno y 14 años reportan haber experimentado agresión física o psicológica en el mes anterior a la encuesta (Enhogar-MICS, 2014).
La situación es grave porque pone en riesgo la integridad física del niño o niña, el adecuado desarrollo afectivo-cognitivo y hasta su vida. Además, está demostrado que el castigo físico está relacionado con otros tipos de abuso, como el trabajo infantil, el abuso sexual, incesto y situación de calle, así como el abuso psicológico.