Santiago. Los estudiantes de cuatro comunidades de Santiago no podrán iniciar el nuevo año escolar debido a la tardanza en los trabajos de construcción de sus escuelas, algunas con hasta cuatro años de ser intervenidas.
En el caso de la escuela Emilio Prud’Homme, del sector Los Pepines, una obra iniciada en el año 2017, aún falta por completar la colocación de persianas, baños y remozamiento del piso.
En un recorrido hecho por elCaribe, se constató como parte del plafón colocado en el nuevo techo está sin concluir. La matrícula pasada rondaba los 222 alumnos y desde el pasado mes abrieron las inscripciones.
En tanto que residentes en la comunidad Cruce de Quinigua, en el municipio de Villa González, esperan la terminación de la escuela, cuya construcción lleva dos años paralizada. El centro se encuentra en un 80 por ciento de avance. Para asistir a las escuelas, muchos estudiantes deben caminar alrededor de tres kilómetros, mientras que para asistir al nivel secundario, tienen que trasladarse hacia las comunidades de El Ingenio Abajo y Villa González.
La comunidad educativa de Quinigua se ha acercado en varias ocasiones al distrito educativo 08-10 en procura de la reactivación de los trabajos, y ha sido el actual director Luis Felipe Acevedo quien los ha acogido y gestionado la reapertura de los trabajos, pero aún falta mucho para que se concluya.
Otra de las escuelas que espera por su terminación está en el proyecto Ciudad del Yaque. Se trata de la básica Seneida de Blanco en el distrito municipal de Hato del Yaque. La escuela tendrá capacidad para alojar a más de 600 estudiantes, pero lleva más de dos años en proceso de construcción.
En tanto que uno de los centros más importantes y que presenta serios problemas en su estructura, es la escuela Manuel de Jesús de Peña y Reynoso, ubicada en el sector Pueblo Nuevo, al lado de uno de los distritos educativos. La escuela presenta grietas y filtraciones desde hace varios años.