Santiago. La unidad traumatológica que funciona en el Hospital Infantil Regional Universitario Dr. Arturo Grullón tiene una demanda diaria de entre 15 y 20 casos de niños con lesiones por diferentes causas.
Debido a su alta demanda, Harry Cruz, director de la unidad, propuso la construcción de una torre quirúrgica de traumas, ya que reciben pacientes desde Villa Altagracia hasta Juana Méndez en Haití. Al centro de salud también llegan niños lesionados desde islas Turcas y Caicos, Martinica y otras, lo que evidencia el buen servicio que se ofrece. “No es que tenemos deficiencia de servicio, sino deficiencia de espacios y por eso es que estamos planteando la construcción de la torre quirúrgica de trauma en el mismo lugar del hospital de niños”, apuntó Harry Cruz al hablar con reporteros de elCaribe. Cruz reveló que la mayoría de traumas de huesos o ligamentos se producen por accidentes en vehículos, motocicletas y por descuido de los padres al caerse de escaleras, de la cama o hasta montando bicicletas o patines.
Reclamo
“El hospital Arturo Grullón es un centro de salud regional que merece más espacio, debido a que tenemos la atención de la población infantil, que es de las más vulnerables y de por si necesita tener un área, como una torre de trauma, para dar le respuesta a la alta demanda que tiene a nivel nacional”, expresó el galeno al resaltar que Santiago cuenta con un hospital regional con espacio muy limitado.
El profesional de la medicina reconoce que el Hospital Regional Universitario José María Cabal y Báez, cuenta con la más completa unidad de ortopedia. Y en segundo lugar figura el Hospital Infantil Arturo Grullón, debido a que cuenta con especialistas en oncología, neuromuscular, en columnas y tobillos. Cruz destacó la entrega del equipo médico que presta servicio en la unidad, pese a que requiere mayor espacio.
Unidad de quemados, única pediátrica
El hospital infantil además cuenta con la unidad de quemados Thelma Rosario, que recibe pacientes desde distintos puntos del país. En un período de seis años ha atendido aproximadamente dos mil menores por diferentes tipos de quemaduras, muchas de ellas por accidentes domésticos, situación sobre la cual han llamado la atención de los padres para ser más vigilantes