Entre septiembre del año 2018 y septiembre de este año 2019 el dólar pasó de costar 49.82 pesos por cada unidad, a 51.42, según las referencias obtenidas sobre la tasa de cambio promedio para compra y venta de divisas del Banco Central.
Eso indica que para comprar un dólar, en septiembre de este año se requiere contar con 1.60 peso más que hace un año. Significa también que en el período citado, el peso dominicano se depreció 3.2%. Recientemente, en las entidades de intermediación financiera la moneda estadounidense tocó la barrera de los 52 pesos por uno.
Eso motivó al Banco Central a inyectar desde el pasado lunes más de US$100 millones al mercado cambiario, en una acción dirigida a mantener la estabilidad cambiaria. En un comunicado público, enviado a los medios de comunicación, la víspera de ese día, el organismo indicó que la estabilidad del mercado de divisas no es negociable y que existe el compromiso de mantener un mercado cambiario ordenado y estable.
Y varios días después aseguró que aunque la meta era colocar cien millones de dólares, no se detendría hasta inyectar 150 millones o más si era necesario.
En lo que va de 2019 las mayores subidas del dólar se han registrado en los meses de junio, cuando la moneda se cotizó a 50.61 para la compra y 50.72 para la venta; en el mes de julio, cuando se ofertó a 50.81 para compra y 50.92 para la venta y en agosto y en septiembre. Es a mediados de este último mes cuando precisamente se colocó al 52×1.
En lo que respecta a 2018 (contando desde septiembre) las mayores alzas se produjeron los meses noviembre (50.13×1) y diciembre (50.21).
En respuesta a la situación que se ha producido el gobernador del Banco Central, Héctor Valdez Albizu, aseguró que el organismo cuenta con reservas internacionales por más de US$7,700 millones que pueden ser utilizados para atender episodios de volatilidad que puedan presentarse en el mercado cambiario.
El pasado martes el funcionario sostuvo que la situación se estabilizó inmediatamente se produjo la inyección de los 100 millones de dólares. Esa inyección se produjo en la víspera (el lunes).
Aseguró que el movimiento que llevaba el tipo de cambio tampoco era brusco, porque en un mercado libre siempre hay operaciones marginales y el banco lo que hace es llevar el control de la tasa promedio ponderada del mercado, de todos los intermediarios. “Puede ser que una multinacional vaya a un banco y le venda tres puntos más que lo que es el promedio ponderado, pero cuando usted promedia, eso está dentro del promedio”, sostuvo, al responder a los periodistas que lo abordaron previo al inicio del VIII Seminario Internacional de Comunicación, que desarrolló como tema principal “El dircom ante las nuevas tendencias mundiales de comunicación”.
La estabilidad relativa
El Banco Central ha señalado que durante todo el presente año ha sido notable la estabilidad relativa del tipo de cambio ante el actual panorama internacional convulso y el comportamiento de las expectativas domésticas, propio de un periodo pre-electoral.
En ese sentido, informó que el tipo de cambio había presentado una depreciación acumulada en el período enero-agosto 2019 de apenas 2.0%, inferior a la observada en igual período del año anterior, de 3.0% y entre las más bajas de los países de América Latina y las economías emergentes.
Tendencia incluye desde Argentina hasta Chile
Valdez Albizu citó hace poco que en los primeros ocho meses del año los países con mayor depreciación acumulada fueron: Argentina (36%), Uruguay (11.6%), Brasil (6.4%), Colombia (6.2%), Paraguay (5%) y Chile (3.6%). De igual manera, las principales economías emergentes han tenido depreciaciones significativas. “En este desafiante entorno internacional, este país ha logrado mantener la estabilidad relativa del tipo de cambio”, indicó.