Ante las declaraciones del obispo de la Diócesis de Baní, monseñor Víctor Masalles, de que sería retirada la visa americana a los presidentes del Congreso, Eduardo Estrellay Alfredo Pacheco, si no incluyen en el Código Penal la no discriminación por orientación sexual, el titular de la Cámara de Diputados desmintió esa información.
Pacheco consideró las declaraciones del sacerdote como “especulaciones sin ningún sentido ni fundamento”, y lamentó el que una persona trascendental y que tanto él admira se haga eco de ello.
“Solo decir, que el distinguido monseñor Masalles, es una persona que yo admiro y respeto muchísimo, y que lamento que una figura de su envergadura, que incluso puede llegar a ser Papa, se haga eco de especulaciones sin ningún sentido y sin ningún fundamento. Pero yo lo sigo admirando”, manifestó incumbente de la Cámara Baja, al ser abordado por periodistas que cubren la fuente del órgano parlamentario.
Minutos antes de la respuesta de Pacheco, el miembro de la comisión especial de la Cámara de Diputados apoderada del Código Penal Eugenio Cedeño, desmintió también lo dicho por el padre de la Diócesis de Baní. “Eso fue una expresión”, sostuvo el congresista.
La tarde de ayer, el destacado obispo publicó en su cuenta de Twitter que recibió la información de que los congresistas dominicanos, Eduardo Estrella, presidente del Senado; y Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados, están amenazados de quedar sin la visa de Estados Unidos “si no aprueban lo de la orientación sexual”.
Ese mismo día, la Cámara de Diputados aplazó “indefinidamente” el conocimiento del proyecto de ley del Código Penal que había sido sancionado favorablemente por el Senado, y sometió uno “nuevo”.
La nueva pieza, propuesta principal de Rogelio Genao Lanza, penaliza la discriminación por orientación sexual en el artículo 185, aunque con un agregado: “las prohibiciones de este artículo se aplicarán sin detrimento de la libertad de conciencia y de culto y con sujeción al orden público y las buenas costumbres.
Se resalta que ayer, cuando la Cámara de Diputados se aprestaba conocer el proyecto de ley del Código Penal de la Repùblica Dominicana, organizaciones del sector privado, sociedad civil y religiosas, agrupadas en el movimiento “Somos la Resistencia”, denunciaron frente al Congreso Nacional una supuesta corrupción, presión y tráfico de influencias utilizadas por las altas instancias de la Cámara de Baja para aprobar de manera inconstitucional el Código Penal.
Uno de los representantes de ese colectivo era un sacerdote: el padre Mario de la Cruz Campusano.