El cantante Ozuna se adueñó del Palacio de los Deportes donde llegó con un sold out y una lista de invitados que fueron sorpresa hasta su entrada al escenario. Además de la noticia que cerrará su Odisea Tour en el Estadio Olímpico el 30 de marzo de 2019.
En dos horas exactas de presentación, producida por SD Concerts, Ozuna recorrió toda su trayectoria y tuvo sorpresas que dejaron al público aun más eufórico, pues nadie imaginó que “El Rey de la Bachata”, Romeo, desfilaría a oscuras por el pasillo que conducía del camerino al escenario, a travesando el púbico, para interpretar sus dos temas en colaboración con “El negrito de ojos claros”, “Sobredosis” y “El Farsante remix”.
“Nos vemos en diciembre”, advirtió Ozuna a Romeo, quien se presentará en el Estadio Olímpico el 15 de ese mes, en un concierto que contará, al igual que el del artista urbano. Ozuna tuvo un escenario 360, una producción más que acertada del empresario artístico Saymon Díaz que permite ver bien al artista en escena desde cualquier punto del público.
Antes que Romeo Santos se adueñara de la euforia del público, especialmente por ser la primera vez que aparece como invitado de un artista internacional en la República Dominicana, estuvo la santiaguera Natti Natasha.
El tema “Criminal”, el cual fue de los más sonados en el 2017, fue de los momentos más especiales del show. Sin embargo, la popularidad de la canción salvó a Natasha, pues su participación dejó esperando más por parte de la artista.
El cancionero de Ozuna abarcó toda su carrera. El disco “Odisea” completo, colaboraciones y otros temas. “Tengo un problema que yo no me quiero ir. Quien me baja de esta tarima ahora”, dijo en varias ocasiones.
Aprovechó “Una flor”, compuesta por Omega y a quien se refirió como “Un maestro dominicano”, para hablar de la mujer y los feminicidios.
“Esta es para la mujer. Pienso que es una flor. Atención al feminicidio. Hombres están aplastando a las mujeres, tenemos que cuidarla. Cuando usted quiera maltratar a una mujer piense que salió de una. La mujer es para darle cariño y amor. Ámela y cuídela. Esa es la mamá de nuestros hijos”, destacó.
Antes de salir del escenario a tomar un respiro, Ozuna presentó a Wisin y Yandel. Les dejó su escenario en señal de agradecimiento de “todo lo que me han enseñado, de quienes he aprendido mucho y me han ayudado a crecer”.
“Los líderes” presentaron “Como antes” y canciones como “Rakata”, “Ahora es” “Pam pam” y “Mírala bien”, antes de unirse en “Me niego” y “Escápate conmigo”.
Mozart y su “Bye bye” también tuvieron su momento; para cantar “El final” invitó a Goldy Boy, desde Santiago; y en “Balenciaga” a Ele a el Dominio
Ozuna llegó con siete músicos, un dj y su familia, al ritmo de “Tu foto”, el punto de partida de las más de 30 canciones que interpretó en el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto, terminando con la canción que inició su carrera al éxito, “Si tu marido no te quiere”.
Juan Carlos Ozuna Rosado, nombre de pila del artista, besó el suelo y dijo sentirse como en su casa, abrazó la bandera y se despidió de las aproximadamente 11 mil almas que abarrotaron el recinto.
Sin duda, el cantautor de 26 años planteó un nuevo reto tanto para sus presentaciones futuras en el país como para los compañeros del género, especialmente los de su generación, que están por presentarse en escenarios dominicanos.
Por otro lado, la contraparte estuvo a cargo de Lo Blanquito quienes trajeron temas como “Telacuti”, “Party de popy”, “Muah”, “A lo clásico, “Popy de boca” y “Hakuna Matata”, logrando conexión con un público que iba desde menores de edad de siete años en adelante, hasta adultos mayores.
Desde las gradas hasta el área VIP, de pie y rodeando el escenario colocado en el centro del lugar, el público se mantuvo parado y coreando cada tema, los flases de los celulares no cesaron en ningún momento, mientras que Saymon Díaz aseguró sorpresas para el que será su último concierto del 2018, “Golden tour”, de Romeo Santos.
Pese a que el concierto evidenció un “sold out” a principios de la semana pasada, la boletería tuvo largas filas de personas que buscaban entrar, sin éxito.