Barcelona.- El capitán del Barcelona, Lionel Messi, ha enviado un burofax al club catalán en el que solicita que se le conceda la carta de libertad para poder firmar por otro club.
Fuentes de la entidad azulgrana explicaron a EFE que, en la misiva, Messi alega la cláusula que tiene en su contrato y que le permitía irse libre antes del pasado 10 junio.
Sin embargo, como el internacional argentino no la ejecutó antes de esa fecha, el Barça lo dio automáticamente por renovado una temporada más, hasta el 30 de junio de 2021, y su cláusula de rescisión pasó a ser de 700 millones de euros.
El Barcelona, que todavía no ha contestado a Messi, entiende que esa es la cantidad que deberá abonar cualquier club que quiera fichar al astro argentino. Y ha dejado en manos de su servicios jurídicos la resolución del conflicto.
En cualquier caso, y toda vez que el Barcelona ya conoce el deseo de ’10’ azulgrana de jugar lejos del Camp Nou la próxima temporada, la directiva que encabeza Josep Maria Bartomeu sabe que solo le queda una opción: negociar con el jugador una salida lo más digna posible y acorde a la magnitud de una leyenda de la entidad como el crack de Rosario.
El Barça tiene cinco días para hacerlo, pues Messi está citado en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, el próximo domingo 30 de agosto, para someterse a la prueba PCR de la COVID-19, tal como establecen los protocolos de LaLiga.
También lo están su amigo Luis Suárez y el resto de jugadores con los que el nuevo entrenador, el holandés Ronald Koeman, no cuenta la próxima temporada.
Y es que el lunes 31 de agosto, todos los jugadores disponibles del primer equipo que están de vacaciones empiezan a entrenarse a las órdenes de Koeman para preparar el nuevo curso.
El preparador holandés se reunió con Messi, sin éxito, hace pocos días, para convencerle de que se quedara para liderar el nuevo proyecto deportivo. Entonces, el internacional argentino ya le adelantó que se veía “más fuera que dentro” del Barça.
Este martes, lo que hasta ahora solo era una posibilidad que tenía en vilo al barcelonismo se hizo realidad con un frío burofax que llegó a las oficinas del club para solicitar formalmente la rescisión de su contrato.
Messi ha decidido marcharse. Y además quiere hacerlo gratis. Ahora es el club el que debe mover ficha. Y el movimiento será más o menos generoso con los intereses de Leo Messi en función de si el jugador quiere retirarse en una Liga de un país exótico o regresar a Argentina o fichar por uno de los grandes clubes europeos en busca de su quinta Liga de Campeones.