Con voz quebrantada y triste, Lissa Mejía hija de doña Rosa Gómez de Mejía resaltó este miércoles, en una misa de cuerpo presente, las cualidades de su madre.
Al hablar, la menor de los hijos procreados en el matrimonio de Rosa Gómez y el expresidente de la República Hipólito Mejía, definió a su progenitora como una mujer noble y solidaria.
“Pensar que ya no hablaremos, que no me visitarás en la oficina, que no estarás en tu casa, que no te volveremos a ver ni sentir tus caricias amorosas. Celebro tu vida y el tiempo que estuvimos”, expresó.
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Personalidades y clase política resaltan virtudes de doña Rosa
Lissa destacó que su madre siempre luchó por la unión familiar y que fue una fuente de cariño y buenos ejemplos.
“Nos queda el testimonio de tu fe, siempre solidaria, fuiste ejemplo de cuidarte y cuidar la familia…prometo en tu honor, seguir pendiente de estos”, manifestó.
Aseguró que como parte del recuerdo de su madre quedará la admiración que ésta sentía por su esposo el expresidente Hipólito Mejía.