Ciudad de México– La lactancia materna juega un papel crucial frente a la pandemia de coronavirus pues es una de las principales defensas contra cualquier agente patógeno como los virus, señaló este sábado una especialista.
“Frente a la covid-19, la alimentación será básica para el sistema inmunológico. Es la principal defensa contra cualquier agente patógeno, en este caso los virus”, dijo a Efe la pediatra y especialista en nutrición Sydney Greenawalt.
Por la Semana Mundial de la Lactancia Materna, que se celebra la primera semana de agosto, expresó que no obstante la importancia de esta práctica, México sigue enfrentando un rezago en la lactancia materna, pues solo 47,7 % de los bebés acceden a la leche de la mamá.
Y de acuerdo con datos del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (SNDIF), en México solo tres de cada 10 niñas y niños menores de seis meses reciben lactancia materna exclusiva.
Esto pone al país por debajo del consumo en América Latina, el Caribe y el promedio mundial y se encuentra lejos de alcanzar las metas de desarrollo sostenible de 50 % para 2025.
La experta señaló que la leche materna no solo nutre al bebé, sino que le proporciona defensas ante infecciones y factores de crecimiento, lo que hace que el niño crezca sano “y lo programa también para ser un adulto sano”.
Explicó que la lactancia materna, entre otras cosas, disminuye el riesgo de desarrollar diabetes, hipertensión, enfermedades como el cáncer y, además, crea defensas ante nuevos virus.
“No sabemos si van a surgir nuevos virus, por ello, lo que tenemos que hacer es tener buenas bases de alimentación dentro de nuestros hogares, empezando por la lactancia”, apuntó.
Puntualizó que ante la pandemia por coronavirus, es urgente que la población, principalmente la infantil, acceda a vitaminas A, B, D y zinc, para reforzar el sistema inmune.
“No podemos salir a una libertad de pandemia hasta que se puedan reunir las características que para ello se requieren”, zanjó.
Greenawalt expresó que la lactancia materna está influenciada por factores sociales, culturales, prácticas y políticas hospitalarias y de atención médica inadecuadas, falta de conocimiento y apoyo calificado, licencia y maternidad insuficiente y ausente, además de una fuerte comercialización de alimentos sucedáneos.
Es por ello, señaló, que se requiere impulsar campañas de información para cambiar comportamientos, así como normas sociales y laborales para ampliar la licencia de maternidad a 24 semanas en el sector formal y también incluir a las mujeres del sector informal, entre otras.
Sin embargo, explicó que aún hay muy poca información respecto a esta práctica. “Desde detalles técnicos como saber cómo pegarse al bebé al pecho o afrontar el dolor, hasta pensar que el bebé no se llena con la leche que la mamá produce”, indicó.
Del mismo modo, dijo que cuando por alguna razón se suspende la lactancia materna, es necesario acceder a una fórmula (sucedáneo de leche) que contenga los mismos nutrientes, por lo que es importante consultar con un especialista sobre la mejor opción.
Finalmente, dijo que es importante apoyar a las mamás, tanto a las que lactan como a las que no pueden o no quieren hacerlo.
“Como sociedad estamos obligados a ayudar a las mamás y a las familias para que tengan conocimiento de lo que es la lactancia y cómo llevarla a cabo. Y ser conscientes de que muchas veces no puede ser y también apoyarlas. No debemos juzgar”, concluyó. EFE