La DNCD ocupó US $4,602,215.00 y 10,774,687.24 millones de pesos dominicanos en un periodo de diez meses
La lucha contra el narcotráfico ha sido el “objetivo” de la mayoría de los presidentes que llegan al país. “Lucharemos contra las drogas; nadie se nos escapara” son algunos de los discursos que se escuchan cada vez que tenemos un nuevo gobernante.
Durante el periodo del exmandatario Leonel Fernández se desmantelaron muchas organizaciones dedicadas al crimen y al narcotráfico; hace unas semanas prometió que de llegar al poder nuevamente mediante su partido La Fuerza del Pueblo, la guerra le será declarada a las drogas.
En el caso de Danilo Medina cuando participó en la VII Cumbre de las Américas, Panamá 2015, ante la presencia de más de 30 dignatarios de la región, dijo que era hora de que los países desarrollados dejarán de exigir a las naciones ubicadas en la ruta del narcotráfico que paguen el mayor precio de ese problema transnacional e indicó que no era posible que mientras las sociedades lidiaban con las víctimas y violencia, el negocio de las drogas siguiera creciendo.
Con Luis Abinader, no ha sido diferente, el actual jefe de Estado ha dicho que todos los funcionarios involucrados en el negocio de las drogas deben pagar por sus hechos.
Según un informe de la Presidencia, en los primeros cuatro meses de la gestión del “Cambio”, República Dominicana exhibía logros contundentes en la lucha contra el narcotráfico con un aumento significativo en las incautaciones de drogas, la captura de personas involucradas en el tráfico de sustancias y los puertos intervenidos.
“Solo entre septiembre y diciembre de 2020, las autoridades lograron incautar 1,964 paquetes de cocaína; siendo 1,652 paquetes por encima de los 312 incautados entre enero y agosto del año pasado”, expresó.
De acuerdo con un reporte suministrado a elCaribe por la Dirección Nacional de Control de Drogas, con la llegada de la pandemia del coronavirus, el cierre de los puertos, aeropuertos y fronteras, la incidencia de los casos disminuyó considerablemente.
Explica que la droga que llega al procede mayormente de Sudamérica, específicamente de Venezuela y Colombia.
Los lugares por donde se introducen o se trata de introducir estas sustancias son el Aeropuerto de Punta Cana, Aeropuerto Internacional de las Américas (AILA), Santiago, Altagracia, San Pedro de Macorís, La Romana, Barahona, Peravia, entre otros
Y por medio de lanchas mediante los puertos, en especial el Multimodal Caucedo y Haina Oriental.
El resumen estadístico que recorre desde el 19 de agosto del 2020 hasta 24 de mayo del 2021 contempla que 17,957.99 kilogramos de drogas fueron decomisados, además 6,061.30 fueron internacionales para un total de 24,019.29 kg.
Sobre los detenidos, 11,820 personas capturadas de estas el 98% eran dominicanos y un 2% extranjeros de los cuales 11 son para fines de extradición, 14 ya fueron extraditados y 07 deportados.
Además, 121 armas ocupadas, 1384 vehículos retenidos.
La DNCD ocupó US $4,602,215.00 y 10,774,687.24 millones de pesos dominicanos.
La fundación InSight Crime destaca en su última publicación que la región presenta una serie de amenazas criminales y de seguridad adicionales que son de interés directo para Estados Unidos y, con respecto a República Dominicana, resalta el activismo de dominicanos en el narcotráfico.
Advierte que pandillas criminales han logrado convertir a República Dominicana en un centro operativo y logístico para todo tipo de economías criminales; pero destaca también que el presidente Biden puede contar con un aliado en el presidente dominicano Luis Abinader en las acciones contra esos males.
InSight Crime, una fundación dedicada al estudio de la principal amenaza a la seguridad nacional y ciudadana en Latinoamérica y el Caribe: el crimen organizado, también aborda en esta publicación la situación de inseguridad en países como Brasil, Chile y la preocupación de Washington con respecto a las conexiones de grupos criminales chinos en la región.
Regulación de la droga en el país
La primera regulación sobre drogas que se conoce en el país, data del 1ro. de julio de 1918, y fue la orden ejecutiva número 161 del Gobierno Militar Norteamericano, que se instaló desde 1916 a 1924.
Esta orden reglamentaba y regulaba la fabricación, importación, preparación, distribución, venta o regalo de opio, morfina, cocaína y otras drogas narcóticas, y aparece en la gaceta oficial No. 2909.
Esta es la base de la legislación de drogas en la República Dominicana, que está formada por 43 disposiciones entre reglamentos, leyes y decretos, según la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Aunque desde los años 30 a los 60 aparecieron casos aislados de uso de drogas y fármacos controlados, algunos investigadores refieren que fue a finales de la década del 60 y principio del 70, cuando comenzaron a aparecer con mayor frecuencia los casos de tráfico, venta y consumo de drogas peligrosas, como la marihuana y la cocaína.
Preocupado por este problema, el Gobierno Dominicano, promulgó la ley 168 del 12 de mayo de 1975, como un mecanismo de control, tanto para el tráfico como para el consumo de drogas, encargando a la Policía Nacional de velar por el cumplimiento de esta ley por vía del Departamento Contra Narcóticos.
Luego de esto, fue aprobada la ley 50-88, con la que se creó la DNCD y por la que se dotó a las instituciones de herramientas legales más fuertes y actualizadas para enfrentar tanto a los narcotraficantes como a sus auspiciadores de estos delitos.
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