Este domingo 22 de mayo, la Ópera Nacional de Ucrania reabrió sus puertas en Kiev por primera vez desde que comenzó la invasión rusa hace tres meses.
La temporada abrió, bajo el marco negro de la guerra, con la obra “El barbero de Sevilla”, de Gioachino Rossini, y le seguirá el “Rigoletto” de Giuseppe Verdi.
El edificio de la ópera, cuya sala tiene capacidad para 1.000 personas, ha reducido su aforo a solo 300 almas, para poder evacuarlas a un refugio subterráneo, si sonaran las sirenas en plena representación.
El director principal del teatro, Anatoliy Solovyanenko, tales restricciones se deben al hecho de que, en caso de una alarma de aire, la audiencia podría acomodarse en el camerino, que según la comisión SES cumple con los estándares de refugio seguro.
Entre el público, hay soldados de uniforme y hasta un médico de un hospital militar.
“Me dedico a curar soldados heridos. Espero que llegue la paz y que todo el mundo pueda venir a espectáculos como éste sin miedo”, decía en el entreacto de la ópera donde muchos han acudido a escuchar música para, durante al menos dos horas, olvidarse de la guerra.
Según el periódico Vechirniy Kyiv (Vespertino de Kíev) actualmente, las representaciones del teatro se llevarán a cabo exclusivamente los sábados y domingos a las 14:00 horas, para que los residentes de Kiev puedan llegar a casa en transporte público antes del toque de queda.
El director principal del teatro, Anatoliy Solovyanenko se refirió acerca de algunos cambios en el repertorio, relacionados con las obras de los compositores rusos. Según la dirección, tales obras ya fueron eliminadas de la cartelera, pero esto no afectará particularmente el repertorio actual de la compañía.
“El cartel de la Ópera Nacional de Ucrania tiene más de 60 representaciones, de las cuales el número de obras de compositores rusos no superó el 20 por ciento. Por lo tanto, la ausencia de obras rusas no creará una crisis de repertorio significativa para la banda”, expresó Solovyanenko durante la sesión informativa.
Desafortunadamente, en un futuro cercano, los espectadores no podrán ver las presentaciones de estreno planificadas, en las que la banda ha estado trabajando durante varias temporadas. Es el caso de la nueva producción de la ópera “La Traviata” de Giuseppe Verdi y de la ópera “Los cuentos de Hoffmann” de Jacques Offenbach, que esta temporada la compañía de teatro presentó en concierto.
El equipo creativo planea expandir el repertorio ucraniano, incluida la ópera del compositor ucraniano contemporáneo Yuri Shevchenko basada en el famoso cuento de hadas infantil “El gato con botas”, que el compositor terminó poco antes de su muerte en marzo de este año.
A pesar de la difícil situación que vive el país, parte de la banda ya regresa a casa, lo que permitió retomar parcialmente la actuación.
Según la dirección del teatro, durante los tres meses de la guerra se llevaron a cabo muchos eventos en apoyo de Ucrania con la participación de famosos solistas de ópera: Lyudmila Monastyrska, Taras Shtonda, Susanna Chakhoyan, Lilia Grevtsova y destacados artistas de ballet de todo el mundo.
El ministro de Cultura y Política de Información de Ucrania, Oleksandr Tkachenko, felicitó al personal del teatro por la reanudación del trabajo: “Hoy vivimos en dos mundos, por un lado la guerra, por el otro, debemos seguir viviendo. Y ese arte nos devuelve a lo bello y brillante… Me alegra que aún en tiempos tan difíciles la Ópera Nacional reúna a sala llena y finalmente vuelva a la vida… La cultura es uno de los elementos clave de la identidad nacional.
Una compañía de más de siglo y medio
La compañía de la Ópera de Kiev se fundó en septiembre de 1867 y es la tercera más antigua de Ucrania, tras la de Odesa y la de Lviv (se pronuncia Lvov). Desde el año 1867 hasta su destrucción en un incendio en 1896, esta compañía actuó en el Teatro de la Ciudad de Kiev. Con el inicio del nuevo siglo, en 1901 se inauguró el nuevo edificio, en el que actúa la compañía desde entonces y que se denomina oficialmente Ópera Nacional de Ucrania Taras Shevchenko, quien fue un gran poeta que remídelo y fue uno de los pilares de la poesía contemporánea ucraniana.
En ese mismo edificio, en 1911 se produjo el asesinato del Primer Ministro Pyotr Stolypin, a manos de un revolucionario de la izquierda. La Ópera de Kiev ha sido una de las más importantes de Europa desde la Primera Guerra Mundial.
En el siguiente video del año 2019, cuando no había guerra ni se pensara que se llegara hasta este estado de cosas, se puede observar la belleza de esta edificación.