Una semana paralizado estará el juicio por los sobornos de Odebrecht para que Ángel Rondón, principal implicado en este caso de corrupción, pueda vivir el duelo por la muerte de su hijo y asista a los actos fúnebres.
El hijo menor del imputado falleció el pasado miércoles en la mañana, y ayer jueves se tenía previsto reanudar el juicio.
Rondón no asistió a la audiencia, en la que su abogado, José Miguel Minier le solicitó a las juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional la suspensión durante nueve días, para darle oportunidad de que asista al novenario y demás actos.
El Ministerio Público no se opuso a la suspensión. La fiscal Mirna Ortiz, a nombre del equipo, envió condolencias a Rondón y su familia. “La pérdida de un hijo es una situación irreparable en la que nadie quisiera verse”, expresó.
En consecuencia, la presidenta del tribunal, Giselle Méndez, suspendió el juicio hasta el próximo jueves 12 de agosto.
La magistrada indicó que el reenvío se ampara en el artículo 15 numeral 3 del Código Procesal Penal que contempla como una causal de suspensión la indisponibilidad de cualquiera de las partes del proceso.