Con los aumentos de precios que se dan en los derivados de petróleo y que el Gobierno no traspasa en su totalidad a los consumidores -por vía de los combustibles- se va acumulando una deuda con la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa), que el Ministerio de Industria y Comercio debe compensar cuando los carburantes bajan.
En el año 2011 el entonces presidente Leonel Fernández emitió el decreto 625-2011, que modifico el decreto 307-11 sobre el reglamento de la ley sobre Hidrocarburos. En su artículo 5, literal h.7, referente a mecanismos de monitoreo, supervisión y ajustes, sobre “Fórmula de precio de paridad de importación”, ese decreto establece que cuando las variaciones porcentuales intersemanales de los precios oficiales de venta de los combustibles sean superiores al 1%, el Ministerio de Industria y Comercio podrá ajustar el precio de paridad de importación, con el objeto de traspasar solo parcialmente estos incrementos, generándose cuenta por pagar con los importadores de hidrocarburos, cuyo pago no excederá el ejercicio fiscal en el que se contraiga.
El literal h.8 del citado decreto establece que cuando las variaciones porcentuales intersemanales de los precios oficiales de venta de los combustibles sean negativas en un 1% o más, el Ministerio de Industria y Comercio podrá ajustar el precio de paridad de importación, con el objeto de disponer el traspaso parcial de dichas disminuciones, a fin de honrar la cuenta por pagar con los importadores de hidrocarburos, generada en períodos de alzas de los combustibles dentro del ejercicio fiscal en que se contraiga.
En 2012, el Estado, vía el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) por el asunto de los precios de paridad de importación, le debía a la Refinería RD$3,000 millones. En 2016 la deuda era de RD$800 millones, según informó para entonces el presidente del Consejo de Administración de esa empresa, Félix Jiménez. En los primeros meses de ese año, 2012, el precio del petróleo llegó a cotizarse por encima de los 110 diez dólares el barril. La deuda se incrementó cuando las autoridades se negaron a traspasar a los precios de los combustibles, esa alza que se produjo en los mercados internacionales. Para entonces, el Gobierno mantuvo congelados los precios de los combustibles por espacio de tres meses, mientras el petróleo tenía una tendencia alcista. En julio de 2012 el Gobierno de entonces había comenzado abonarle a la Refinería parte de lo que le adeudaba a medida que el precio del carburante iba disminuyendo.
Hace varios días el ministro de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) Víctor –Ito- Bisonó, aseguró que el Gobierno dominicano ha destinado RD$250 millones para evitar las alzas de los precios de la mayoría de los combustibles. El funcionario refiere que el Gobierno absorbe esos aumentos, pero en la práctica es una deuda que acumula con el importador, que en este caso es la Refinería.
Bisonó calcula que el precio del petróleo de junio 2020 a enero 2021, refleja alzas acumuladas de 34.5 %, traduciéndose en aumento de los precios de los derivados del petróleo que se comercializan en la República Dominicana. “Sin embargo, ese no es el aumento que se registra en el país”, indicó.
Y agregó: “Desde el Ministerio de Industria y Comercio se ha dispuesto absorber más de un 70 % del aumento. Por ejemplo, en el ámbito de la transparencia del presidente Luis Abinader y de cada uno de sus ministros, les puedo decir que el Gas Licuado de Petróleo (GLP) debió haber subido en las últimas semanas RD$10 cada viernes y, sin embargo, el Estado ha asumido RD$7.00”, indicó el funcionario. Lo que representa en términos absolutos ese 70% absorbido, pasa a ser una deuda de Industria y Comercio con la Refinería Dominicana de Petróleo.
elCaribe ha solicitado tanto a Industria y Comercio como a la Refinería los datos actualizados o cortados a la fecha sobre el tema de las deudas. Está a la espera de que las informaciones sean remitidas.
