El turno de los imputados del caso Odebrecht de presentar sus pruebas en el juicio y contrarrestar la teoría del Ministerio Público ha llegado.
Esto así, ya que el órgano acusador terminó ayer de incorporar todas las evidencias que tenían contra los acusados y no queda más que comenzar con las pruebas a descargo.
En ese sentido, el próximo lunes, el principal imputado Ángel Rondón iniciará a presentar sus pruebas con las que pretende demostrar a las juezas del Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional que no fue el intermediario entre la constructora Odebrecht para pagar sobornos a funcionarios y legisladores a cambio de adjudicaciones de obras públicas.
Los abogados del acusado iniciarán con las pruebas documentales, es decir, las que están por escrito. Algunas de ellas serán leídas completamente en la audiencia, otras parcialmente, y otras más serán incorporadas por estipulación (sin leerse).
Luego, llevarán a estrado a 30 testigos, entre ellos funcionarios y legisladores (pasados y presentes).
MP concluye presentación pruebas
En la jornada de ayer, los fiscales de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) terminaron de incorporar las evidencias en contra de Rondón, Víctor Díaz Rúa, Conrado Pittaluga, Andrés Bautista, Tommy Galán y Roberto Rodríguez.
El Ministerio Público logró que al juicio ingresaran más de mil pruebas documentales, algunas con soporte en formato digital y además 21 testigos, incluyendo a tres ejecutivos de Odebrecht.
Con estas evidencias quieren acreditar su teoría de que los imputados incurrieron en los delitos de soborno (dados por Odebrecht), prevaricación, falsedad en declaraciones juradas, enriquecimiento ilícito y lavado de activos. Este proceso duró alrededor de cuatro meses.
Sin embargo, varias evidencias del Ministerio Público fueron rechazadas, es decir, no admitidas en el juicio, por incumplir con los requisitos que establece la norma, como, por ejemplo, no depositar las traducciones de documentos que estuvieran en idioma español.
Unas de las pruebas excluidas, fueron las delaciones de siete ejecutivos de la constructora. Estas declaraciones eran una de las evidencias más importante que tenía el Ministerio Público en contra de los imputados.