San Francisco de Macorís.- En medio de fuertes medidas de seguridad por parte de la Policía Nacional, el Tribunal de Servicio Permanente del distrito judicial Duarte, impuso 300 mil pesos, como medida de coerción, a un chofer que agredió a un coronel durante un operativo en esta ciudad.
El sub director del Comando regional Nordeste, Eusebio Escolástico recibió el golpe la semana pasada en medio de una protestas que montaron los choferes de la ruta Nagua, Villa Riva, y demás zonas, frente al Ayuntamiento Municipal para condenar la prohibición de una parada vehicular.
Contra el agresor José Manuel Cáceres, conocido como Pirulo, también se impuso visitas periódicas a ese tribunal.
La decisión del citado tribunal se produjo luego que la Policía enviara a Cáceres a la justicia para que respondiera por el hecho, donde el oficial recibió una “trompada” cayendo al pavimento de inmediato, acto que fue grabado en video.
El abogado Víctor Rojas al hablar en nombre de su defendido Manuel Cáceres, dio a conocer la disposición, donde anunció que el tribunal había dispuesto de 300 mil pesos de fianza y visita periódica e impedimento de salida del país.
Lea: Hoy conocerán coerción a chofer que agredió coronel policial durante protesta
Expresó que la jueza que conoció el caso no tenía la mínima condición para que al chofer se le colocara una medida que no fuera la que se le impuso.
De su parte el coronel Eusebio Escolástico no quiso referirse al dictamen del tribunal negándose hablar con los periodistas a su salida del Palacio de Justicia.
Durante el proceso, el Palacio De Justicia estuvo fuertemente rodeado por agentes de la Policía para evitar se produjera alteración del orden público.
El transporte de pasajeros en las rutas San Francisco-Villa Tapia y Nagua y San Francisco-Santiago quedó paralizado este lunes, en solidaridad con el chofer Cáceres.
El presidente la Federación de Trabajadores del Transporte del Cibao (FESITRAPU), Cristino Rodríguez (Villa), dijo al salir del tribunal “nosotros estamos complacidos con la medida del tribunal, al indicar que no había otra cosa que hacer ya que los choferes y la policía son siempre amigos, y nuestro compañero nunca tuvo la intensión de golpear al oficial”.
Cientos de choferes de toda la provincia Duarte se mantuvieron pendientes del conocimiento de la medida que se desarrolló por más de cinco horas.