Santiago. El hundimiento en varios tramos de la calle Ramón Antonio Hernández volvió a poner en evidencia el peligro que representa construir en zonas por donde pasa la falla de la cordillera Septentrional.
La vía, a pesar de que en algunos puntos fue levantada en cemento, presenta un avanzado nivel de deterioro que dificulta el tránsito vehicular.
Los moradores de esa zona esperan la intervención para la reparación de la calle, que permite comunicar con Gurabo y la avenida 27 de Febrero.
Los choferes de carros y de motocicletas que transitan por la vía dicen son barios los accidentes registrados al caer en uno de los hoyos ocasionados por los hundimientos. Miguel Domínguez, residente en la zona, dijo que la travesía por esa calle resulta una verdadera odisea y cuestiona que pese al crecimiento urbanístico no sea reparada.