Entre mediados de agosto del año 2020 y el 31 de mayo de 2021, el Gobierno –vía el Banco Agrícola- formalizó préstamos para producción de gallinas ponedoras y pollos de engorde, así como para producir  y comercializar cerdos por un monto de 1,325 millones 833,631 pesos.

Esos recursos fueron vitales para el fortalecimiento de ambas industrias que producen dos de las carnes principales en la canasta alimenticia de los dominicanos, especialmente porque ayudaron a afrontar parte de los momentos difíciles y retos que en el período citado trajo la pandemia de covid-19. En la actualidad, la porcicultura pasa un mal momento, luego que en criaderos domésticos de 14 provincias de detectaran focos de peste porcina africana (PPA), que si bien no se traspasa a humanos y la carne se puede consumir sin problema, ese evento ha empujado a una baja en la demanda.

Mientras, en el caso del pollo la situación es al revés: Ha habido un crecimiento de la demanda y eso ha contribuido a una elevación de precios a niveles nunca vistos. Algunos reportes señalan que la libra ha llegado a comercializarse a 80 y 85 pesos, es decir, entre 15 y 20 pesos por encima de los niveles anteriores a la aparición de la PPA en cerdos. No es común que el costo cambie tan bruscamente en corto tiempo.

Para gallinas ponedoras y pollos de engorde los préstamos formalizados en el Banco Agrícola entre el 16 de agosto 2020 y mayo 2021 totalizaron 789 millones 590,390 pesos, mientras que para para producción y comercialización porcina el monto ascendió a 536 millones 243,241 pesos, según las estadísticas oficiales obtenidas por el periódico elCaribe.

Los recursos, tomando en cuenta la presencia y radio de acción de la institución en el territorio dominicano, han sido formalizados atendiendo a solicitudes formuladas por sucursales y regionales. Entre ellas están la regional 01, que abarca Santo Domingo, Higüey, Hato Mayor, San Cristóbal y Monte Plata. La regional 02, que comprende a San José de Ocoa, Azua, Baní, Neiba, Barahona, San Juan de la Maguana y Comendador, y la regional 03 que comprende Nagua, Arenoso, Samaná, Río San Juan, Villa Riva, San Francisco de Macorís y Cotuí. La regional 04 abarca Santiago de los Caballeros, Moca, Bonao, Salcedo, Constanza y La Vega, y la regional 05 tiene a Santiago Rodríguez, Monte Cristi, Puerto Plata, Mao-Valverde, Dajabón y San José de las Matas. Naturalmente, dentro de estas, las zonas que producen la mayor cantidad de cerdos y pollos están en Espaillat, La Vega y Santiago.

De acuerdo con cálculos de representantes del sector, la porcicultura dominicana mueve unos  RD$15,000 millones al año. La Asociación de Granjas Porcinas agrupa alrededor de 13 mil granjas, aproximadamente, que suman cerca de 300 mil empleos directos e indirectos, incluidas las procesadoras y las embutidoras, ha dicho Luis Brache, el presidente de la organización.

Mientras, los números que maneja el presidente de la Federación Dominicana de Porcicultores, Israel Brito, indican que la porcicultura dominicana tiene poco más de 20 mil productores, de los que solo 365 son de las granjas organizadas.

Del lado de la Asociación Dominicana de Avicultores (ADA) se ha asegurado que la oferta de pollo ha venido creciendo todos los meses. “Incluso, en los últimos cuatro meses el país ha estado consumiendo más pollos que los que se consume en diciembre. O sea, estamos hablando que, en el último año previo a la pandemia, en promedio, se consumían 17.5 millones de pollos al mes, ahora rondan los 18.3 millones”, dijo la organización, dejando por sentado la semana pasada que si hay un incremento de precios, eso no obedece, ni es una respuesta a una cuestión de escasez. Cuando la ADA hizo esa precisión, todavía los niveles de demanda de la carne fresca de cerdo no habían mermado a los niveles de este momento.

De acuerdo con datos del Banco Central de República Dominicana (BCRD), en la producción de pollo se había registrado una caída del 8 % el pasado año 2020, respecto al año anterior (2019, cuando no había pandemia).

En 2020 el país estuvo varios meses cerrado por la pandemia de covid-19, en procura de evitar una escalada incontrolable de contagios) y cuándo fue “desescalando” las medidas de restricciones, los negocios donde se vende y consume la carne blanca tampoco estuvieron abiertos totalmente. De hecho, todavía a esta fecha de 2021 hay limitaciones.

 ¿Importación? ¿Cuándo? ¿Costará menos?

El lunes, el ministro de Agricultura, Límber Cruz, aseguró que el Gobierno está acelerando la producción de carne de pollo con el fin de abastecer a la población y evitar la especulación en su precio. Calculó que  la producción pasó de 18 millones de unidades de pollo, que consume el país a 19.3 millones por mes.

Dijo que está llegando al país un cargamento importado para inyectarlo al mercado y mantener la estabilidad de los precios. Sin embargo, en la nota que se emitió sobre ese punto, el Ministerio de Agricultura no especificó cuándo llegarán las aves, ni el país de procedencia, ni el precio al que se estaría vendiendo al público a nivel local, como forma de ir posiblemente forzando a los comerciantes a reducir precios. “Están llegando contenedores de pollo. La población que no se desespere, porque está entrando pollo y no tienen por qué alarmarse, ya habrá oferta en la República Dominicana”, sostuvo Límber Cruz.

Desde el punto de vista del funcionario público, los principales factores que han contribuido a disparar el consumo de pollo en un 15 % tienen que ver con la apertura de la economía dominicana y el empleo, así como el crecimiento inesperado de la actividad turística.

¿Faltante o especulación?

Cuando el precio de un producto como el pollo se eleva, hay factores como el de la baja oferta que pueden estar incidiendo, especialmente si la demanda se dispara demasiado, como parece estar ocurriendo, en la medida que la gente se limita a consumir cerdo y suple ese espacio con pollo.

Sin embargo, el Instituto de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor) ha manifestado sus reservas o inquietudes sobre el particular y ha advertido que está analizando si es así, o si de por medio están los especuladores.

El director del organismo, Eddy Alcántara, dijo el domingo que se está verificando lo que ha generado en los últimos días el alza inusual de la carne blanca y advirtió que “en caso de encontrar prácticas especulativas se procederá a sancionar a los responsables, porque están afectando los bolsillos de los consumidores”. “Procederemos en consecuencia, si se determina que hay especulación económica”, advirtió.

 

 

 

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