Santiago.- La mayimba Fefita la Grande celebró sus 75 años de vida dando gracias a Dios por su salud y por sus hijos, y sin importarle los cuestionamientos o memes sobre su edad, expresando que por el contrario, se los goza.
“Óigame es la primera vez en esta edad que tengo que celebro un cumpleaños, nunca lo había celebrado, era un sueño, desde que cumplí 70 le dije a mis hijos que quería celebrar un cumpleaños, porque nunca en mi vida lo había celebrado y ahora lo estoy celebrando junto a mi gente, a mis seguidores, a mis admiradores, no todos porque como tu entenderás jamás en la vida puedo hacer un cumpleaños abierto, porque dónde lo hago, si hay once millones de gente quieren ir diez”, expresó una emocionada Fefita, previo a su entrada a la discoteca Las vegas, donde se llevó a cabo la fiesta.
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La Gran Soberana también expresó sentirse muy feliz porque estaba toda su familia con ella, sus 5 hijos, recordando que Dios le llevó una, así como parte de sus nietos. “Estoy feliz de verdad que sí. Mi padre y mi madre no están conmigo, pero están espiritualmente, porque papa Dios se los llevó”.
Aprovechó para darle gracias a Dios por darle la oportunidad de ver 75 años de vida y 54 de carrera artística, y dijo que seguirá hasta que tenga ánimo, hasta que se muera, afirmando que eso no es ahora.
La Mayimba hizo su entrada al centro de diversiones, donde la esperaban cientos de personas. Allí no pudo disimular su felicidad y comenzó a repartir abrazos a quienes se le acercaron, entre ellos al Prodigio y Mery Hernández, quienes más adelante formarían parte de la oferta artística de la noche.
Luego se sentó en un trono dispuesto para ella: un sillón rojo con un letrero dorado y negro que rezaba “La Gran Soberaba”. Desde ahí escucho la bendición a la fiesta, realizada por el padre Neftalí.
La cartelera artística la conformarían el Ballet Folklórico, María Díaz, La India Canela, Yovanny Polanco, El Prodigio, Sergio Vargas, Yiyo Sarante, y al final Fefita haría un show para cerrar la fiesta.
El lugar fue ambientado con colores patrios. A la entrada fue colocado un enorme pastel de fantasía, que evocaba un escenario artístico en uno de sus pisos, donde se observaba una escultura de Fefita con el acordeón en mano. Otro de los pisos del pastel fue bordeado con fotos que rememoran momentos importantes de su vida, como el Gran Soberano, su coronación como reina del carnaval de Santo Domingo y otros.