La escasez de los principios activos básicos, la industria como sector estratégico, los cambios de abordaje e interacción con el médico y el paciente son algunos de los retos que presentó la pandemia al sector farmacéutico.
Santo Domingo.- Desde el inicio de la investigación, desarrollo y distribución de las vacunas contra la COVID-19, la industria farmacéutica, en todo el mundo, se ha convertido en el punto central de la conversación. Una realidad que, sin dudas, ha llevado a enfrentarse a grandes retos que inciden directamente en el éxito de los planes de inmunización en todo el mundo. Dicho esto, es necesario contar con una mayor vigilancia en calidad de las vacunas, mantener alianzas en pro de la vacunación y continuar esfuerzos para crear las leyes de vacunación que preserven dicha acción como un bien público.
Estas recomendaciones forman parte de las reflexiones ofrecidas por los doctores Carlos Espinal, director del Global Health Consortium (GHC) del Robert Stempel College of Public Health de Florida International University; y el doctor José Brea del Castillo, presidente de la Sociedad Dominicana de Vacunología, en el conversatorio de SaludHable “¿Qué lecciones dejan las vacunas COVID-19 al sector farmacéutico?”, organizado por la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos, Inc. (ARAPF) en colaboración con la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (FIFARMA).
En el encuentro, el doctor Espinal destacó el gran esfuerzo realizado por la industria farmacéutica para la producción de vacunas en un tiempo récord para combatir el virus de la COVID-19. No obstante, también señaló el acceso equitativo de las dosis, las nuevas variantes del SARS-CoV-2 y la desconfianza en las vacunas como amenazas latentes para la efectividad de los programas de inmunización.
“La industria tiene que trabajar de manera nacional, en cooperación internacional y con la comunidad para poder desarrollar estrategias que mitiguen el impacto de estos retos tan importantes”, indicó el doctor Espinal.
Por su parte, el doctor Brea del Castillo enfatizó en los desafíos a los que se ha enfrentado la industria farmacéutica, de cara a dar respuesta a la crisis sanitaria ocasionada por la COVID-19, dentro de los cuales destacan la escasez de los principios activos básicos, la industria farmacéutica como sector estratégico, los cambios de abordaje e interacción con el médico y el paciente; y las oportunidades en la innovación, producción, crecimiento local y regional y de mercadeo.
En ese mismo orden, también señaló la importancia de mantener la transparencia en el proceso de vacunación, indicando que se requiere una estrategia comunicacional clara, transparente y de un mayor liderazgo para generar confianza en las vacunas. “El personal de salud debe estar informado sobre el desarrollo, la autorización, distribución y utilización de las vacunas frente a COVID-19. Asimismo, la población general debe mantenerse informada sobre los procesos relacionados a la vacunación y a los beneficios y efectos secundarios que producen las vacunas”, dijo el presidente de la Sociedad Dominicana de Vacunología.
En dicha actividad, ambos galenos motivaron a la población a continuar asistiendo a los centros de vacunación para terminar con la pandemia por la COVID-19.
Datos locales
Según una encuesta sobre el Grado de Percepción de Vacuna Contra la COVID-19, desarrollado por la Sociedad Dominicana de Vacunología, el 68% de los dominicanos está dispuesto a vacunarse, mientras que, el 29% indicó que no se aplicarán la vacunas contra la COVID-19 y el 3% reservan sus respuestas o no están decididos.
Además, se prevé que, si en el país se mantiene el ritmo de mil personas vacunadas diariamente, se estima que en 118 días estará inoculada toda la población dominicana.