SANTO DOMINGO (AP) — Los principales gremios empresariales de República Dominicana mostraron el martes esperanzas de que las recién establecidas relaciones diplomáticas con China generarán oportunidades de negocios, inversión y turismo.
“Estas relaciones pueden ser muy positivas”, dijo a periodistas Campos de Moya, presidente de la asociación de industriales. De Moya además consideró que con sus puertos marítimos, la isla caribeña podría trabajar para convertirse en un punto de intercambio de manufacturas de China hacia el mercado regional.
El gobierno dominicano anunció la noche del lunes la ruptura de sus largas relaciones diplomáticas con Taiwán para establecer por primera vez vínculos con el gobierno de Beijing.
De manera paralela, el canciller dominicano, Miguel Vargas, y su homólogo chino Wang Yi suscribieron el martes en Beijing un comunicado conjunto en el que anunciaron la apertura en la relación bilateral.
Según el documento conjunto, República Dominicana reconoce a Beijing como “el único gobierno legítimo en la representación de toda China” y considera que “Taiwán forma parte inalienable del territorio chino”.
“Es una decisión trascendental que abre un mundo de oportunidades”, dijo Pedro Brache, líder del Consejo Nacional de la Empresa Privada.
Desde que República Dominicana estableció una oficina de asuntos comerciales en China en la década pasada sin que existieran relaciones diplomáticas, el intercambio entre ambos países se ha incrementado cada año hasta llegar a más de 2.000 millones de dólares anuales, de acuerdo con estadísticas oficiales.
De forma previa a la apertura de relaciones bilaterales, el presidente dominicano Danilo Medina asistió el mes pasado a la inauguración de la primera empresa de capital chino que se establece en una zona franca dominicana.
Joel Santos, presidente de la asociación de hoteles, confió que con la apertura de vínculos pronto pueda haber vuelos directos de China a República Dominicana y comience el flujo de turistas asiáticos hacia las paradisiacas playas locales. Recordó que China es el principal emisor de turistas y “esto es una oportunidad” para el país caribeño, que con la recepción de seis millones de viajeros al año es la potencia turística de la Antillas.
El giro en la diplomacia dominicana representó un golpe para Taiwán, considerada por el gobierno de Beijing como una provincia rebelde desde que se separaron en 1949. La decisión dominicana deja a Taiwán apenas con 19 aliados internacionales y ocurre sólo meses después de que Panamá también rompiera en junio de 2017 relaciones con Taipei para abrir vínculos con China.
El gobierno de Taipei manifestó de inmediato su indignación y anunció la cancelación de todos los proyectos de cooperación con República Dominicana, que a lo largo de décadas han incluido donaciones millonarias para la construcción y equipamiento de hospitales, escuelas, infraestructura e incluso la instalación del sistema de emergencias 911.
La presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen, dijo el martes a periodistas en Taipei que la decisión dominicana es el resultado de la presión china mediante su “diplomacia del dólar”.
El gobierno chino emprendió en 2016 una nueva campaña para reducir la presencia diplomática internacional de Taiwán luego de que llegara a la presidencia Tsai, cuyo Partido Progresista Democrático se opone de forma tajante a la política de “una sola China”.