Washington, 16 jul (EFE).- El futuro secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, desveló este martes que el Pentágono está “desarrollando” un sistema de “patrullas pasivas” que, bajo el nombre de Operación Centinela, velará por la navegación en el estrecho de Ormuz y en el golfo de Omán.
“Estamos intentando evitar cualquier posible error de cálculo desarrollando un concepto llamado Operación Centinela con el que realizaremos patrullas pasivas en el estrecho de Ormuz y en el golfo de Omán para disuadir a Irán de realizar cualquier acto de provocación”, dijo Esper durante una comparecencia ante el Senado.
Sin embargo, Esper, que en caso de ser confirmado por la Cámara Alta se convertirá en el próximo secretario de Defensa de EE.UU., no detalló en que consistía este concepto de patrulla pasiva.
El actual secretario del Ejército de Tierra señaló a Irán como “una amenaza regional” y reconoció la necesidad de que el Pentágono esté “preparado” para “responder” a cualquier agresión por su parte, pero subrayó que Washington no quiere entrar en guerra con Teherán.
Estas declaraciones se producen en un momento en el que la tensión entre ambos países ha ido en aumento a raíz de la decisión de la Casa Blanca, el pasado mes de abril, de endurecer las sanciones contra exportación de petróleo por parte de Teherán.
Como consecuencia, las autoridades iraníes amenazaron con bloquear el estratégico estrecho de Ormuz, por el que cruza una gran parte del crudo mundial, si las sanciones impuestas por EE.UU. afectaban a su industria energética, vital para la economía del país.
Desde entonces se han producido una serie de incidentes en la región de los que el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, ha acusado al Gobierno de Irán o a sus “secuaces” de acciones como el sabotaje sufrido por dos buques cisterna a comienzos de junio o el derribo de una aeronave no tripulada que sobrevolaba cerca de la costa iraní.
Debido a esta escalada, Washington ha decidido aumentar su presencia militar en la región mediante el envío del portaaviones USS Abraham Lincoln, de cuatro bombarderos B-52 con capacidad nuclear y de 1.500 nuevos soldados.
La semana pasada, el Pentágono anunció que los Departamentos de Estado y de Defensa están trabajando de manera conjunta para crear una coalición internacional que vele por la seguridad de los buques que navegan por los estrechos de Ormuz y de Bab al Mandeb. EFE