Washington, (EFE).- Estados Unidos confirmó este miércoles que a partir de mayo permitirá reclamar ante cortes estadounidenses propiedades expropiadas tras la Revolución cubana, una medida que podría abrir la puerta a miles de demandas contra compañías extranjeras y a una disputa con la Unión Europea (UE) ante la OMC.
El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, anunció la próxima activación de los títulos III y IV de la ley Helms-Burton, que todos los presidentes estadounidenses habían mantenido suspendidos desde que se aprobó esa norma, en 1996, en base a un acuerdo alcanzado con la UE.
“La Administración de (el presidente Donald) Trump no suspenderá más el título III, una decisión que entrará en vigor el 2 de mayo”, dijo Pompeo en una rueda de prensa.
Esa medida, adelantada este martes a Efe por un alto funcionario, permitirá a los estadounidenses, incluidos los cubanos naturalizados, demandar ante cortes de EE.UU. a las compañías que supuestamente se benefician de propiedades en Cuba que eran suyas o de su familia antes de la Revolución cubana en 1959.
El cambio abre la puerta a demandas en EE.UU. contra empresas de todo el mundo, entre ellas cadenas hoteleras españolas como Meliá, Barceló o Iberostar; así como la compañía canadiense Sherritt, dedicada al sector minero.
Cuando se aprobó la ley en 1996, había “hasta 200.000” reclamos de individuos y empresas que querían recuperar sus propiedades expropiadas en Cuba, una cifra que podría haber aumentado en las últimas dos décadas, explicó a los periodistas la secretaria de Estado adjunta de EE.UU. para Latinoamérica, Kimberly Breier.