Tegucigalpa.- Si hubo o no corrupción en la compra de siete hospitales móviles y otros requerimientos para hacer frente en Honduras a la pandemia de COVID-19, que ha dejado más de 1.500 muertos y cerca de 50.000 contagios, lo saben solo los involucrados en la adquisición, sobre quienes pende una investigación.
Lo que sí es cierto y se está expandiendo como pandemia cultural, en vías públicas de importantes ciudades, medios de prensa y redes sociales, es una pregunta que a muchos ya les incomoda y están queriendo borrar: “¿Dónde está el dinero? Honduras lo exige”.
La pregunta es parte de una campaña del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), que ha venido denunciando presuntos actos de corruptela en las compras hechas por Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H, estatal) durante la pandemia, que desde marzo ha causado graves daños sociales y económicos en el empobrecido país.
EL PICO DE LA CAMPAÑA DEL CNA
La campaña del CNA durante la pandemia alcanzó su pico el domingo por la noche, cuando un grupo de personas pintó, en letras blancas y grandes, sobre un puente aéreo del Bulevar Suyapa, al este de Tegucigalpa, “¿Dónde está el dinero? Honduras lo exige”.
Fotografías aéreas y un video sobre el momento en que está siendo pintado el mensaje, se han masificado en redes sociales y difundido además en calcomanías, billeteras, camisetas y gorras, entre otros motivos.
“¡Es el momento de recuperar la democracia y reconstruir el Estado de derecho! Como ciudadanos preguntamos ¿dónde está el dinero? Porque el reclamo social exige que los responsables materiales e intelectuales de este megrafraude enfrenten la justicia. Todos con: #HondurasLoExige”, es uno de varios mensajes difundidos por el CNA.
El escándalo más sonado durante la pandemia que afecta a Honduras, es la compra en Turquía de siete hospitales móviles, por casi 48 millones de dólares, de los que dos llegaron el 10 de julio, para San Pedro Sula y Tegucigalpa, las dos ciudades más importantes del país, pero todavía no están funcionando, por un enredo que no huele a limpio. Los cinco restantes llegarían en septiembre.
Aunque ningún funcionario ha confirmado si hubo corrupción o no en la compra de los hospitales y otras cosas, de hecho sí hubo, a juzgar, por ejemplo, que entre los primeros dos que llegaron venían piezas usadas o vencidas desde 2016, entre otras irregularidades.
El CNA es como una piedra que incomoda en el zapato de quienes están siendo investigados a raíz de las denuncias contra Invest-H, cuyo director, Marco Bográn, fue separado en junio y está siendo investigado por el Ministerio Público.
“Honduras se ha convertido en el país más pobre del continente y el más corrupto de Centroamérica, pero la fuerza de todo un pueblo exige el paradero de los más de 90.000 millones de lempiras (3.600 millones de dólares) que el Gobierno obtuvo para hacerle frente a la pandemia”, ha señalado en sus últimos mensajes el CNA.
REACCIÓN DE LA SECRETARIA DE FINANZAS
Ante las afirmaciones del CNA sobre los recursos para enfrentar la pandemia, la secretaria de Finanzas, Rocío Tábora, dijo el martes que de los 2.500 millones de dólares que el Parlamento autorizó para que el Gobierno buscara con los organismos internacionales, solo se ha recibido el 15 %, de lo que a la vez se ha ejecutado el 63 %.
Agregó que para la búsqueda de fondos, la institución autorizada es la Secretaría de Finanzas, que trabaja en conseguir recursos más concesionales, más baratos, los que los organismos multilaterales “pueden poner a disposición del país en este momento de pandemia”.
Según Tábora, las operaciones gestionadas a la fecha son 1.342,2 millones de dólares, de los que solo 742,3 millones están suscritos, mientras que los desembolsos recibidos suman 373,7 millones.
Además, los fondos que se han negociado son de “bajo costo” para atender las necesidades más urgentes en la pandemia, tanto en materia sanitaria, como reactivación económica, expresó la ministra.
INTENTO DE BORRAR “¿DÓNDE ESTÁ EL DINERO?”
La novedad en Tegucigalpa el lunes, fue la pregunta pintada en uno de los puentes del Bulevar Suyapa, que luego comenzó a aparecer, en una manta blanca y letras negras, en una montaña de San Pedro Sula, en el norte del país, y en una de las cabeceras del puente sobre el río Choluteca, ciudad del mismo nombre, en el sur.
El mensaje de Tegucigalpa quiso borrarlo, al parecer personal de la alcaldía, que tiró aceite y arena, además de cerrar el paso por la vía durante varias horas.
Pero la pintura blanca especial se plasmó tanto en el pavimento, que el esfuerzo de borrarla fue inútil. El mensaje siguió legible, mientras proliferaban “memes” en redes, a cual más duro, contra el Gobierno, comenzando por el presidente del país, Juan Orlando Hernández, y otros salpicados con humorismo e ironía.
“De la memoria, ya es imposible arrancar…el que borra otorga”, escribió José Yeco, con una fotografía en blanco y negro del alcalde capitalino, Nasry Asfura, simulando una mascarilla en su cara con la pregunta “¿Dónde está el dinero?”.
Entre otros mensajes, alguien escribió: “Dice el que pintó el grafiti, que si devuelven el dinero, les dice cómo borrarlo”.
El martes, jóvenes portando la bandera de Honduras en azul y blanco, le dieron otra mano de pintura a la pregunta, mientras que la directora del CNA, Gabriela Castellanos, indicó en redes “El pueblo no está ‘pintado’ y ahora demuestra su indignación”.
TOLERANCIA A LA CORRUPCIÓN E INTOLERANCIA A LA CRÍTICA
El analista Manuel Torres, dijo a Efe que el reclamo del CNA “es una respuesta social a la inefectividad penal en la persecución de la lucha contra la corrupción” y evidencia que “en Honduras ya se maneja el tema de la corrupción como un gran secreto a voces; es decir, que es de tal magnitud, que no puede ser escondida”.
“Una campaña pública como la del CNA, muestra un paso adelante en el reclamo de lucha contra la impunidad que ha rodeado el tema, y que alcanzó niveles mayores de indignación con el robo de recursos públicos destinados a contrarrestar la pandemia de COVID-19”, señaló Torres.
En su opinión, la ciudadanía muestra que ya no es ni indiferente, ni tolerante ante el tema de la corrupción y que, lo que se está tratando de evaluar y cuestiona, son las respuestas institucionales sobre el tema, que no han sido efectivas, sino cómplices hasta la fecha.
Sobre el intento, supuestamente de la Alcaldía de Tegucigalpa, de querer borrar la pregunta del CNA, Torres indicó que “el uso de vías públicas, financiadas por la ciudadanía, para colocar mensajes, es un ejercicio pleno de libertad de expresión y derecho a la opinión”.
“Cualquier intento de la alcaldía u otro organismo por borrar esos mensajes de un área pública, no es más que una manifestación de su tolerancia a la corrupción e intolerancia a la crítica ciudadana”, enfatizó el analista.