Santiago.- Las residentes de las comunidades enclavadas en la cordillera Septentrional protestaron con una marcha para demandar la reconstrucción y asfaltado de sus caminos vecinales.
La caminata encabezada por el sacerdote Nino Ramos partió Monumento a los Héroes de la Restauración, bajó por la avenida Las Carreras, dobló por el Antonio Guzmán e hizo una parada con tres minutos de silencio frente a la gobernación provincial.
Los manifestantes portando cartelones con los reclamos, subieron por la calle Del Sol hasta concluir nuevamente en el monumento.
En las comunidades enclavadas en la cordillera están habitadas por 450 familias que piden se cumplan la reconstrucción y asfaltado de 18 kilómetros de caminos vecinales.
El sacerdote Nino Ramos dijo que en este país la distribución de la riqueza se ha realizado de manera muy desigual entre los dominicanos.
“Los gobiernos que hemos tenido desde el 1966 hasta el presente, se han concentrado en privilegiar a Santo Domingo, Santiago, La Romana, La Vega, San Francisco y alguna que otra provincia más, olvidándose casi totalmente de las zonas rurales”, apuntó.
Dijo que lo mismo ha sucedido con la administración de la justicia, la cual existe para privilegiar a los poderosos económicamente y los pobres siempre pagan la culpa de los platos rotos.
“A nosotros, los del campo, nos engañan con promesas que no suelen cumplir, mientras en Santo Domingo abundan los túneles, metros, elevados y teleféricos”, criticó el sacerdote.
Indicó que hay avenidas en Santo Domingo y Santiago que ya no aguantan más capas de asfalto, pues, sobrepasan el nivel de los contenes, mientras en los campos, cuando llueve, las gentes se enterran hasta las rodillas y no pueden salir del lodo.
Recordó que desde inicios del anterior gobierno los comunitarios han estado luchando por una carretera y unos caminos vecinales, y que aunquebconseguieron lo primero a base de salir siete veces a las calles de Santiago, y los dejaron plantados con los caminos vecinales.
Desde el 26 de noviembre pasado están esperando el cumplimiento de la promesa de que harían los caminos. El 10 de diciembre pasado, el Ministro de Obras Públicas, Deligne Asención también lo prometió y siguen esperando.
“Para el campo no hay ni siquiera la voluntad de invertir 7 u 8 millones arreglando unos caminitos, pero para la autopista aparecen 2,500 millones”, expresó Nino Ramos.
Dijo que están cansados y por eso decidieron a salir a las calles después de todas las oportunidades a las autoridades de que comenzaran los caminos y los ignoraron.
Finalmente expresó que estarán en las calles de Santiago y todos los martes hasta que el gobierno en una acto de justicia comprenda que también los del campo son dominicanos, gentes que pagan Impuestos y tienen el derecho a vivir más dignamente.