Santiago.- El cierre del mercado de la Placita y la amenaza de tomar la misma decisión con el Hospedaje Yaque por parte de la alcaldía, por ser focos de contaminación y posible propagación de Coronavirus ha encontrado el rechazo de vendedores.
La clausura del local de la Placita obligó a que vendedores ofertaran sus mercancías en medio de las calles.
A pesar de la pertinaz llovizna, algunos compradores en su mayoría mujeres desafiaron la disposición de las autoridades municipales.
Desde la pasada semana, el alcalde Abel Martínez ha venido alertado a la población a no asistir y consumir los productos agropecuarios que se ofertan en el hospedaje Yaque debido a las condiciones de insalubridad en que operan.