República Dominicana y Estados Unidos coincidieron en la “necesidad” de utilizar las nuevas tecnologías de comunicación para ampliar el intercambio entre las naciones de la región y así lograr mayor eficacia en el combate al crimen transnacional.
En la apertura ayer de la Conferencia de Seguridad de las Naciones del Caribe (Cansec, por sus siglas en inglés), el ministro de Defensa dominicano, Carlos Díaz Morfa, y el jefe del Comando Sur de EE. UU., Craig Faller, mostraron su interés en que las naciones participantes puedan compartir sus experiencias, según indica un comunicado del Ministerio de Defensa. Díaz Morfa y Faller plantearon la importancia de crear mecanismos para optimizar las operaciones militares conjuntas que garanticen la “defensa de los espacios territoriales” y las “soberanías de las naciones del Caribe”, respetando lo establecido en las leyes vigentes en cada nación.
De acuerdo a un documento suministrado por los organizadores, los dos altos mandos se mostraron a favor de que las acciones ejecutadas por las fuerzas militares y policiales de los países centroamericanos y caribeños respalden las políticas públicas de defensa y seguridad en la región.
“Sin información compartida, es como si estuviéramos ciegos. La unión, hace la fuerza; proponemos el respeto y que podamos asumir los protocolos y los lineamientos que sean necesarios de manera conjunta. Al final, lo importante es la voluntad, para resolver cualquier problema”, dijo el ministro dominicano.
La información destacó que se encuentran en el país representantes de Francia, Belice, Guyana, Haití, Jamaica, San Vicente y las Granadinas, Surinam y del Caricom. De manera virtual participan Anguila, Antigua y Barbuda, Bahamas, Canadá, Dominica, Granada, Islas Caimán, Islas Vírgenes Británicas, Montserrat, Países Bajos, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, Trinidad y Tobago y las Islas Turcas y Caicos.
En la víspera, el Comando Sur de Estados Unidos donó a República Dominicana tres hospitales móviles y dos centros de operaciones en apoyo a la lucha contra la covid-19 y para incrementar la capacidad de respuesta del país durante desastres o crisis de salud.