La organización Mundial de la Salud (OMS) y entidad relacionada al sector, buscan sensibilizar y concientizar a la población sobre la importancia de hacer uso responsable de los antibióticos.
Para la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma), el correcto uso de los antibióticos y su impacto en la disminución de la resistencia antimicrobiana son fundamentales para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Explicó que las súper bacterias y su resistencia a los tratamientos convencionales son actualmente uno de los principales desafíos que enfrenta la salud pública. Señaló que diversas causas de neumonía, infecciones de piel y meningitis son algunos ejemplos de enfermedades ocasionadas por organismos multirresistentes.
Los parásitos, hongos y bacterias se fortalecen superando incluso los antibióticos existentes para tratarlos; así han aparecido infecciones incurables que pueden acabar con la vida de un paciente. Lo que se conoce como resistencia antimicrobiana, la cual según la OMS se produce cuando los microorganismos, sean bacterias, virus, hongos o parásitos, sufren cambios que hacen que los medicamentos utilizados para curar las infecciones dejen de ser eficaces.
Según la OMS, para el 2050 la resistencia antimicrobiana ocasionaría 10 millones de fallecimientos anuales y se convertiría en la principal causa de muerte. Por ello, desde el 2015 se estableció que una semana del mes de noviembre se dedicará a reflexionar sobre el tema; este año la Semana Mundial de Concientización sobre el uso de Antibióticos se efectuará desde 18 al 24.
“Desde su aparición, los antibióticos han sido trascendentales para la atención de la salud de las personas y para la medicina moderna tal como la conocemos; sin embargo, su abuso y uso irresponsable por parte de la población es un desafío que nos corresponde a todos entender y atender. Desde Fedefarma, reconocemos la importancia de propiciar mejores prácticas de consumo en la población y de dotar a los países de políticas e iniciativas para disminuir la propagación de la resistencia a los antibióticos.”, destacó Victoria Brenes, directora ejecutiva de la entidad.
Una de las medidas relevantes que plantea la farmacéutica al profesional de la salud, para impedir la resistencia antimicrobiana, es evitar recetar un solo tipo de antibiótico, lo cual genera una presión selectiva y hace que las bacterias aprendan a evadir los mecanismos de defensa. Además, busca propiciar que los médicos conozcan la epidemiología local del centro de salud donde trabajan, pues los gérmenes circundantes y sus tipos de resistencias no son los mismos en todos los lugares.
“Cuando se va a tratar una infección sea por hongos, bacterias o parásitos, no se puede pensar sólo en el germen que la causa, como se hacía en tiempos de antaño; ahora es necesario ir más allá y analizar si un agente infeccioso es resistente o no, para elegir el antibiótico que se receta. Se requiere mayor conocimiento y pericia para dar un tratamiento adecuado”, resaltó la doctora Monique Baudit, Senior Medical Manager Hospital de Pfizer.
¿Cómo prevenir la resistencia a antibióticos?
Fedefarma destaca que detener el avance de las súper bacterias también está en manos de la ciudadanía. Entre las prácticas responsables se encuentran el no tomar antibióticos sin receta médica ni compartirlos con otra persona; seguir el tratamiento todos los días indicados, ser constantes con el lavado de manos y la higiene personal, y acudir al médico para que valore siempre su condición.
En la prevención de la resistencia antimicrobiana cada acción individual cuenta; “es importante que la población comprenda que, si se siente bien con unos días de tratamiento y por eso lo deja, puede estar aportando a que, dentro de un plazo no tan largo, exista una bacteria resistente con la cual incluso un familiar pueda contagiarse”, explicó Baudit.
También, es importante que las personas conozcan que la prolongación de la enfermedad, la necesidad de más pruebas y la utilización de otros fármacos, aumentan el costo de la atención sanitaria a los pacientes con infecciones resistentes.
“Es vital que la población en general comprenda que la resistencia a antibióticos nos compete a todos, y que con pequeñas y sencillas acciones podemos impactar positivamente los sistemas de salud. Informes de la OMS han proyectado incluso pérdidas de hasta 100 billones de dólares al 2050 si no se hace nada para revertir la tendencia”, resaltó.