Berlín, 26 abr (EFE).- El Gobierno alemán está a favor de ir reduciendo las restricciones para los inmunizados y los que se han recuperado de la covid-19, pero no de aplicar estas relajaciones también a las personas con un test de antígenos negativo reciente, informan este lunes medios locales.
La canciller alemana, Angela Merkel, hizo la diferenciación este lunes en una reunión de la dirección de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU), y horas antes de que tenga lugar su encuentro con los jefes de gobierno de los 16 estados federados para abordar la evolución de la campaña de vacunación.
En este mismo sentido, la edición digital del semanario “Der Spiegel” asegura que el borrador de acuerdo presentado por el Ejecutivo federal para la cita de esta tarde con los “Länder” subraya la diferencia entre personas completamente inmunizadas (con pauta completa) y quienes presenten un test negativo.
“Según la actual evaluación del Instituto Robert Koch, los inmunizados y recuperados (de la enfermedad) tienen un menor riesgo de contagiar a otras personas que aquellos con un test negativo de antígenos”, asegura el borrador del acuerdo. Puede ser por esto necesario “situar en una mejor posición” a los inmunizados que a los no vacunados, prosigue el texto.
En la reunión deberá detallarse concretamente qué restricciones se relajarían para ellos, más allá de su equiparación con quienes tienen un test negativo. La negociación está centrada en las visitas al comercio minorista y las limitaciones a los viajes.
El Gobierno alemán quiere asimismo que los inmunizados sigan cumpliendo las medidas básicas, como el uso de mascarilla o la distancia de seguridad.
La reunión de Merkel con los jefes del gobierno de los estados federados también va a evaluar el orden de prioridades fijado al inicio de la campaña de vacunación, cada vez más cuestionado.
Algunos “Länder” han relajado ya el orden acordado -cuatro permiten ya las vacunas con AstraZeneca a todos los grupos de edad- y otros están presionando para eliminar en mayo esta regla, mientras el Gobierno federal desea que todos se muevan de forma uniforme. EFE