Fue Carlos Alcaraz, no Novak Djokovic, quien conjuró el “¡¿Cómo hizo ese?!” tiro en las semifinales del Abierto de Francia que se hizo viral en minutos y del que se hablará por muchos años.
Fue Alcaraz, de 20 años, no Djokovic, de 36, quien tenía la juventud de su lado, por supuesto, con la diferencia más grande de edades en la historia de un Grand Slam en semifinales desde 1991. Djokovic utilizó toda su experiencia, implacabilidad y su condición física para derrotar a un acalambrado Carlos Alcaraz 6-3, 5-7, 6-1, 6-1 en Roland Garros ayer y se acercó a una victoria de su título 23 de Grand Slam, lo que sería un récord, rompiendo el empate que tiene con Rafael Nadal.
Mañana, Djokovic jugará contra el cuarto preclasificado Casper Ruud, quien eliminó a Alexander Zverev (22do) por 6-3, 6-4, 6-0. Ruud jugará en su tercera final en los últimos cinco grandes incluido el Roland Garros el año pasado, cuando perdió con Nadal, pero todavía está en busca de su primer trofeo de Grand Slam.