El jinete Joel Rosario, recientemente seleccionado para ingresar al Salón de la Fama de la hípica en los Estados Unidos, manifestó que agradece a todas las personas que en el país contribuyeron con su carrera, en su época de jinete local.
Rosario dio crédito a los entrenadores, dueños de caballos, sus compañeros jinetes y todos los actores de la actividad hípica en el país; así como a los aficionados, por el apoyo a su carrera desde su época en la cual montaba en el local Hipódromo Quinto Centenario, hasta ahora que lo hace en diferentes hipódromos de Estados Unidos y otras latitudes. También agradeció a ese mismo tipo de actores hípicos en los Estados Unidos por su apoyo.
“He tenido mucha gente que me ha apoyado aquí, en Estados Unidos, y en República Dominicana”, señaló Rosario. “Si uno no tiene ese apoyo es muy difícil llegar”. El brillante jinete mencionó al entrenador Eugenio DeChamps como una de las personas que más le ayudó en su desarrollo como jinete, en el país.
Rosario señaló que ha tenido que trabajar duro para alcanzar el lugar en el cual se encuentra. El hoy inmortal de la hípica en los Estados Unidos recordó que al radicarse en ese país, llegó primero a California, donde tenía que levantarse bien temprano, visitar los establos, en busca de oportunidades para montar ejemplares.
La comida y el inglés
Al señalar algunos de los obstáculos que tuvo que saltar al radicarse en los Estados Unidos, Rosario mencionó el adaptarse a la comida y la barrera del idioma, por lo cual tuvo que aprender inglés, aunque dice que solo domina un poquito esa lengua.
“He tenido que trabajar duro, muy duro. Todos los días”, observó Rosario, de 39 años, quien obtuvo su licencia para montar caballos de carreras en los Estados Unidos en el 2003. Al momento de su elección Rosario había producido ganancias con sus carreras por $319,313,804 millones de dólares.