Madrid. Messi alcanzó su gol 400 en La Liga Santander que apunta otra vez el Barcelona, que agrandó su estado de euforia con su sexta victoria seguida.
De su lado, el Real Madrid logró su primera victoria de la competición en el 2019 para sosegar su declive. El cuadro azulgrana, que presumió especialmente de pegada para sentenciar al Eibar, cerró el tramo del torneo con cinco puntos de renta respecto al Atlético Madrid, que volvió a ganar por 1-0 y que es el único empeñado en mantener el ritmo del campeón y evitar un final de campeonato especialmente prematuro.
El conjunto de Ernesto Valverde, con Philippe Coutinho en su once inicial, cerró la jornada con una victoria sin brillo ante el Eibar, que se marchó del Camp Nou de vacío, con tres goles en contra y la novena derrota en su mochila en otras tantas citas con el equipo catalán.
La imagen del Eibar fue digna pero insuficiente ante la pegada de Luis Suárez, que hizo dos de los goles. Marcó también Messi, que ya lleva 400 en los 435 partidos que ha jugado en Primera. El argentino, que acumula ocho en los cinco partidos recientes, es el máximo anotador histórico de la competición.
El Real Madrid salió del Benito Villamarín con los tres puntos pero no con mejores sensaciones. Frenó su sangría gracias a un gol de Dani Ceballos a falta de dos minutos para el final (1-2).
El segundo peor Real Madrid del siglo XXI en cuanto a puntuación, desplaza al Alavés de la cuarta plaza e iguala en la tercera con el Sevilla, al que recibe la próxima jornada.
El Atlético Madrid sigue a lo suyo. Beneficiado por el traspié del Sevilla en San Mamés se consolidó como el único capaz de cuestionar el dominio del Barcelona. Con un gol de penalti de Antoine Griezmann encontró el premio a su ambición y a la insistencia frente el Levante, que resistió sólo una hora.
Sucumbió el Sevilla ante el renacido Athletic (2-0), que disfrutó de los dos goles de Iñaki Williams.